¿DERROTA ..........O PARÉNTESIS?

Después de unas elecciones conviene hacer una análisis sosegado del resultado de las mismas tanto si se ganan como si se pierden para no caer en los excesos de la euforia o del pesimismo; excesos que pueden nublar el entendimiento y condicionar acciones futuras sobre premisas distorsionadas.


Foro Asturias obtuvo unos resultados muy aceptables en las elecciones autonómicas del mes de Mayo y con un partido de nueva creación logró la victoria y el gobierno del Principado amén de otros muchos municipios incluido el importantísimo de Gijón.


Medio año después se producen las elecciones generales pasando a ser la tercera fuerza política y conservando 92.549 votos.

Si bien se logró el principal objetivo de tener por primera vez representación asturiana por parte de un partido no estatal, la relación hegemónica PP-FORO se ha invertido a favor del primero.

¿A qué obedece tal circunstancia? En primer lugar a que tradicionalmente las fuerzas de carácter autonómico reciben bastantes menos votos en las elecciones generales que en las autonómicas y Asturias no ha sido una excepción.

En segundo lugar a una sensación de "pánico" entre la ciudadania por la evolución durante las últimas semanas de la prima de riesgo y la situación económica en general que ha inducido a muchos votantes a depositar su confianza en Rajoy por encima de todo para que éste logre un gobierno con la máxima fortaleza posible a la hora de encararar una situación límite.

Un tercer elemento lo constituiria el desgaste sufrido fruto de la acción del gobierno, desgaste que en Asturias no debiera ser muy significativo por el escaso tiempo trascurrido pero que habria que tener en cuenta dada la decidida acción del Gobierno del Principado en el desmantelamiento de algunas "prácticas clientelares" con el resultado conocido de abiertos enfrentamientos en torno a la TPA o el Niemeyer.

En cuarto lugar hay que mencionar la actitud abiertamente hostil y beligerante de poderosos medios de comunicación que ven amenazados sus tradicionales privilegios y componendas con un poder que se ha mantenido casi perpetuo desde los inicios de la democracia. El poder mediático tradicional de Asturias es incompatible con el gobierno de Foro porque aquel está condicionado en buena medida por capitales que son ajenos en líneas generales a los intereses económicos asturianos.

Por último no hay que olvidar las grandes expectativas generadas por el gobierno de Foro, expectativas que hay que enmarcar en un estado de gravísima crisis económica dentro de unos recursos muy limitados y en una situación de casi asfixia presupuestaria que conduce irremediablemente mas que a un desarrollo de un programa propio a pilotar como se pueda una acción impopular en muchos casos de recortes para atajar el déficit y lograr una estabilidad presupuestaria impuesta desde el Gobierno Central y desde Europa.

Todos estos elementos mencionados explican principalmente junto a otros de menor impacto la diferencia de los resultados obtenidos por el PP y FORO en las elecciones autónomicas y general.

La suma de 92.549 asturianos que se han mantenido fieles a Foro Asturias es una buena base para afianzar un proyecto político de futuro en el Principado en un escenario incierto aún tanto a nivel autonómico como estatal.

A pesar de la abrumadora victoria de Rajoy en las elecciones generales su situación no va a distar mucha de aquella por la que pasa el Gobierno del Principado con un directorio francoalemán que le va a empujar a tomar muchas medidas que no van a ser entendidas por una parte importante de la sociedad.

Si la victoria de Rajoy ha sido contundente el desgaste de su gobierno a corto plazo también va a ser contundente y ya hemos visto cómo han caido gobiernos de uno y otro color con mas o menos apoyo durante la actual inestabilidad financiera.

Podriamos decir que lo mas peligroso es recular en mitad del rio y entre la corriente por lo que urge en el frente interno liquidar con éxito el tema de la TPA y del Niemeyer evitando la pérdida de autoridad y manteniendo la imagen de un gobierno decidido por encima de cualquier otra circunstacia.

La ciudadania tanto los que se han mantenido fieles a Foro Asturias como aquellos que han depositado su voto en esta ocasión en el PP de Rajoy van a estar muy atentos observando la acción política de uno y otro partido en sus diferentes escenarios.

La resaca y la euforia popular comienzan inevitablemente a partir de ahora a menguar y Foro Asturias se ha mantenido sobre esa base fiel nada desdeñable de 92.549 votos como tercera fuerza política en el marco hostil de las elecciones generales y logrando por primera vez y de forma histórica tener voz propia en el parlamento nacional.

En este país sostennella et non enmendalla y resistir es vencer por lo general funciona y Foro Asturias tiene muchas oportunidades de seguir manteniendo la hegemonía dentro del Principado.

Alfonso I el Católico tercer rey de Asturias comprendió que sus fuerzas no estaban lo suficientemente preparadas para alcanzar la línea del Duero y mucho menos la del Sistema Central por eso en un gran acierto estratégico creó el llamado "desierto del Duero", una extensa zona de nadie despoblada y arrasada entre dicho rio y la cordillera cantábrica para amortiguar los golpes de un enemigo infinitamente superior.

Queda pues fortificarse, resistir y esperar tiempos mejores, nuestras bases son firmes y ya han pasado razonablemente bien la primera prueba de fuego.

Ya veremos si a don Mariano no se le sublevan los clanes bereberes................... Madrid deberá esperar pero seguirá siendo nuestro objetivo DEUS VULT

Por último felicitar a Álvarez Sostres el "león de Avilés" para que defienda a capa y espada nuestros legítimos intereses en Madrid.



¡¡FUERZA SOSTRES!! y no dudes en abrir fuego -por supuesto dialéctico- contra todos aquellos que atenten contra los intereses del Pricipado.

Por primera vez se va a oir la voz de Asturias en el Congreso de los Diputados, el rugir del "león de Avilés".

Enrique Álvarez Sostres nació en Avilés (Asturias) en 1945.
Licenciado en Historia por la Universidad de Salamanca.