He aquí esa irrelevancia política, social y mediática con su jaculatoria de chigre postulándose en tan ínfimo púlpito como la Guestia del psicoanálisis y la prédica.
Llegan los ``aulladores'' ¡¡llega el circo¡¡ con toda su cohorte de bufones y loros funambulistas; llegan los señoritos ociosos haciendo sonar sus botas de cascabeles con la estrambótica pretensión de convertirse en los nuevos Moisés que llevarán al pueblo a la ``tierra prometida'' que no es aquella otra que el paraíso donde tienen pensado medrar a cuenta de los incautos.
Han crecido a la sombra del hampa socialista y viendo al régimen tambalearse buscan a la desesperada nichos de supervivencia haciendo guiños a todo aquello que tiene posibilidades de medrar: el revisionismo republicano, la inmigración, la taifeñobalkanización, el Toledanismo-Ovetense disfrazado de ``lingua llariega'' etc, etc.
Sólo tienen un objetivo salvarse del naufragio del régimen corrupto de la FSA-PSOE que durante 40 años ha dinamitado todos y cada uno de los sectores productivos de la economía asturiana prestándose a rematar el último de ellos: el energético en su versión térmica.
No son patriotas, no les engañen a Vds, no son mas que una partida de vividores a la desesperada intentando buscar un buen árbol que les cobije para poder seguir glayando y garrando la fruta de los árboles.
Pretenden borrar los principales episodios de la historia de los antepasados, que serían todos inventados porque oscurecen su pequeña miseria cotidiana de supervivencia. Asi se entiende que se agarren a la mediocridad de la torpe actuación político-militar contra la francesada en el siglo XIX donde la chapuza y la cobardía fue la nota dominante al margen del acierto en contactar con las autoridades británicas su único logro real.
Debe dolerles el gran esplendor de la Monarquía Asturiana en todos sus ámbitos: territorial, político, artístico, ideológico pues confrontar tal período de gloria a la ruina actual que legó su régimen corrupto es impactante.
La Monarquía Asturiana fue GRANDE, con mayúsculas; mucho mas grande que la Monarquía Toledana o la Tolosana anteriores en el tiempo e incluso que la Leonesa posterior que acabó siendo abducida por Castilla. Fue mas brillante y mas grande en todos y cada uno de sus campos de actuación: militar, político, artístico, religioso, etc, etc y dudo mucho que pudiera ser superada por su paticular república de cabras que pretenden instaurar en estos riscos para ponerse ellos luego a pastoriarnos y a llindarnos.
No se dejen engañar. Estos son los tres principales mandamientos de la nación asturiana.
1 Amarás a la patria que no es algo etéreo sino la herencia de tus antepasados.
2 Asturias es España y el resto no es mas que tierra conquistada.
3 Santificarás las fiestas históricas que son tres principales: la resistencia contra Roma, Covadonga y la lucha contra al Andalus y la Revolución del 34
La república es romana como la llingua d' alxamía, el toledanismo ovetense, importado por la mozarabía en el siglo VIII con la arribada de clérigos y refugiados. La lengua de la nación era y será celta pues algún dia renacerá de sus escombros por la gracia de Dios.
Decir que el ``toledanismo ovetense'' es la lengua del país es intentar suplantar al carbayu por el ocalito porque este último ya lleve unos siglos instalado y ocupe cada vez mayor extensión. Ni el castellano ni el toledanismo ovetense son la lengua de la nación porque ésta está extinta pero conserva fosilizados los elementos relictos necesarios para su gloriosa resurrección.
La Monarquía es un fenómeno europeo y atlántico en tanto en cuanto la república florece en los putrefactos monipodios del Mediterráneo donde tiene su origen. Basta echar una ojeada: Monarquía- Holanda, Reino Unido, Bélgica, Noruega, Suecia; República: Italia, Albania, Grecia, Argelia, Libia, etc, etc.
Asturias es atlántica, Asturias es monárquica y Asturias ha de oponerse al poderoso eje vectorial del Mediterráneo: Cataluña, Valencia, Madrid que es revanchista-republicano y prorromano y andalusí.
No se dejen engañar por los aulladores; están a sueldo de sus amos catalanes.