jueves, 28 de noviembre de 2019

EPIFANÍA DE GAÑANES, EL MONIPODIO PSEUDOCULTURAL SE ENROCA EN SAN FERNANDO
















Agárrate gallego la cartera porque quieren robarte no solo el eurito sino también el D.N.I. ese D.N.I. que desde la noche de los tiempos lleva la bandera celta.

Una operación teledirigida desde Madina Mayrit con epicentro en Cantoblanco para domar a la nación gallega y embucharla de puré romano como a los gansos para  producir foie gras.

Madrid no quiere mas que romanos y Reyes Católicos y para ello están dispuestos a indigestar a Galicia con una serie inédita e inabarcable de peplums romanófilos y de paso a aflojarle la faltriquera.

¡¡¡10 millones de euros!! costará el pesebre de la abundancia romanófila donde acudirá presto todo el conglomerado de bestias y cuadrúpedos  a fartarse, a fartarse a lo grande porque paga el pueblo.

¿Qué Lugo ni Luga romano? Dijeron que era una fundación romana, la ciudad de Lugo. Lo dijeron durante generaciones utilizando a los alumnos gallegos como rehenes del terrorismo mediático-cultural de unos docentes sinverguenzas, poco preparados y que apenas saben hacer la O con un canuto como para ponerse a enseñar nada.

Todo era mentira porque Lugo ya existía mucho antes de que llegaran los romanos como así lo ha probado la ARQUEOLOGÍA

Una valerosa arqueóloga probó que la muralla de León no era romana La muralla de León no es romana ni del siglo IV  y gracias a ese sensacional descubrimiento y a que a pese a todos los intentos habidos y por haber no han logrado doblegarla se ha dictaminado también que La muralla de Lugo tampoco es romana.

Llueve sobre mojado vayamos a la hemeroteca del diario EL COMERCIO DE GIJÓN  donde puede leerse sobre la supuesta muralla romana de Gijón lo siguiente:

























Todos sus castillos de naipes se están derrumbando  con gran estrépito. Los peplums romanófilos tocan a su fin.  DIARIO EL PAÍS "El acueducto de Mérida no es romano".

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¿Donde están todos esos partidos que se dicen gallegos y galleguistas que consienten semejante atentado a la historia de Galicia?  EL ATENTADO

Galicia es la cuna de la civilización celta, el epicentro de dicha cultura; Sykes y otros muchos especialistas tanto nacionales como extranjeros han ido avanzando a despecho de las cátedras romanófilas teledirigidas desde Madrid en el conocimiento y la certeza de que Galicia es el embrión  de la gran cultura celta que irradió por toda Europa mucho antes de que el Imperio Romano comenzara a asomar.

"Desde que los llamados Reyes Católicos verificaron el hecho que Zurita llamó la doma y castración del Reino de Galicia, la lengua gallega ha quedado prohibida en la Administración, en los Tribunales, en la enseñanza, y en la Iglesia evitando que nosotros , los gallegos, rezásemos en nuestra propia lengua."

Esta frase cualquiera quien fuere su autor viene como anillo al dedo de lo que está sucediendo en estos momentos  con la indiferencia cuando no la colaboración de las autoridades gallegas.

Galicia necesita fábricas para trabajar el pueblo y no pesebres para adornarse los señoritos que traicionan la memoria histórica  de Galicia. No necesitamos mas salones para que se paseen con sus botas de siete cascabeles.

Galicia ponte en pie y di no a un museo que con tus recursos económicos busca suplantar y bastardear por motivaciones políticas la identidad del país en una operación orquestada por las Universidades Madrileñas.  

miércoles, 27 de noviembre de 2019

CODEX FORI MUSSOLINI

























EL PERGAMINO OCULTO EN LA BASE DEL MONUMENTO ES UNA ODA AL GOBERNANTE FASCISTA ITALIANO Y UN INTENTO DE PRESERVAR EL LEGADO DE SU RÉGIMEN.


BBC

El misterioso mensaje que Benito Mussolini "escondió" en un obelisco de Roma y que acaba de ser descifrado


Como en una buena novela de intriga, el pergamino escrito en latín se encuentra oculto bajo un enorme obelisco en Roma, Italia.
¿El problema para los que quieren conocer su contenido? Que el obelisco de 300 toneladas no se puede mover.
Pese a ello, los historiadores Bettina Reitz-Joose y Han Lamers han logrado descifrar lo que dice el documento a través de tres fuentes casi desconocidas que encontraron en bibliotecas y archivos de Roma.
Según aseguran, el pergamino arroja luz el líder fascista italiano Benito Mussolini (1883-1945), su régimen y sobre cómo quería ser visto por las generaciones futuras.
El texto está enterrado junto a monedas de oro en la base del Obelisco de Mussolini, erigido en 1932 en el complejo deportivo Foro Itálico de Roma, antes conocido como Foro Mussolini.
Por eso el pergamino se conoce como Codex Fori Mussolini.
EL TEXTO ESTÁ FUERA DEL ALCANCE DE LOS ESTUDIOSOS, EN LA BASE DEL OBELISCO MUSSOLINI, DE 300 TONELADAS.  
"El texto no estaba pensado para los contemporáneos de la época", le dice a la BBC la doctora Reitz-Joose, quien trabaja en la universidad holandesa de Groningen.
"El obelisco se convirtió en un espectáculo, pero la existencia del texto no se divulgó. Estaba dirigido a una audiencia de un futuro remoto".
En aquella época, los fascistas habían hecho muchos descubrimientos arqueológicos de los tiempos del Imperio Romano, cuenta la investigadora.
"A medida que excavaban ruinas, los fascistas pensaron en crear su propia versión autorizada de sus hechos para las generaciones futuras".

¿Qué dice el texto?

El panegírico de 1.200 palabras fue escrito por el estudioso de la cultura clásica Giuseppe Amatucci y contiene tres partes.
La primera es una historia general de los "logros" del fascismo y el ascenso al poder de Mussolini.
Describe Italia como un país al borde del desastre tras la Primera Guerra Mundial que fue rescatado por Mussolini, "quien regeneró el país gracias a sus conocimientos y determinación sobrehumana", apuntó el doctor Lameres, quien trabaja en la Universidad Humboldt de Berlín y en la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica.
"El texto presenta a Mussolini como una especie de nuevo emperador romano, pero también, con un lenguaje bíblico, como un salvador del pueblo italiano".
La segunda sección trata de la Organización Juvenil Fascista, en cuya sede se construyó el obelisco, y de sus programas para la juventud.
La tercera parte se centra en la construcción del Foro Itálicoy la erección del obelisco.
Junto al texto se encuentra una medalla que presenta a Mussolini ataviado con una piel de león sobre su cabeza.
No era raro en el Renacimiento -explican los expertos- que se colocaran medallas bajo los obeliscos. Pero el descubrimiento de un texto largo y detallado aseguran que no tiene precedentes.

¿Por qué en latín?

La doctora Reitz-Joosse sugiere que el autor escogió una lengua del pasado para trazar un vínculo entre el Imperio Romano y el auge del fascismo.
Además, asegura que los fascistas estaban intentando restablecer el latín como la lengua internacional del fascismo: "Era parte del intento de crear un equivalente fascista de la Internacional Comunista", que defendía el comunismo internacional.
"Esos planes no tuvieron éxito", explica.
La ironía de este texto es que su descubrimiento estaba ligado a la caída del obelisco y por tanto del fascismo. De algún modo, los fascistas imaginaron su propio declive y caída, señala Reitz-Joosse.
Sin embargo, agrega, el documento cumple su propósito original al enviar la voz del fascismo hacia el futuro.
"El texto está aún allí y no podemos alcanzarlo. Todo lo que hacemos es estudiarlo y analizar sus estrategias, poner el texto en contexto y criticarlo más que permitir que comunique su mensaje sin trabas".






El Codex del Foro Mussolini: un texto latino de la Italia fascista (The Codex fori Mussolini: A Latin Text of Italian Fascism), escrito por Han Lamers Bettina Reitz-Joosse fue publicado por la editorial Bloomsbury en inglés.







LECCIONES DE ARQUEOLOGÍA ALTERNATIVA

























Alberto Álvarez Peña, en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón

LNE


El etnógrafo y experto en tradiciones populares del entorno celta, Alberto Álvarez Peña, fue el encargado de dar a conocer el pasado jueves en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón el documental "El enigma de los geoglifos", de Thierry Berrod. La cinta hace referencia a las enormes huellas terrestres que solamente pueden ser vistas desde la altura.
Los geoglifos de Nazca, en Perú, son unas de las grandes incógnitas de la naturaleza pero también en Gran Bretaña abundan por ejemplo lo que llaman "figuras de colina" como el Caballo de Uffington, un caballo de 110 metros de largo grabado en el suelo, o El Hombre Largo de Wilmington un gigante 71 metros y de origen desconocido como todos estos restos geoglifos.
Otro ejemplo de los geoglifos en territorio británico es El Gigante de Cerne Abbas enorme figura grabada en la tierra de un hombre desnudo y que se relaciona con Hércules.

Uno de los temas que la arqueología alternativa saca a menudo a colación en calidad de "rarezas del pasado" que se vinculan a estas estructuras. Los geoglifos son figuras construidas en laderas de cerros o en planicies, usando la técnica de adición de tierra o piedras, con tonalidades oscuras de origen volcánico a manera de mosaico, como se dio a conocer durante la proyección.

martes, 26 de noviembre de 2019

VINO Y PLOMO LA LOCURA DEL IMPERIO ROMANO














DIARIO ABC

¿ESTABAN ENVENENADOS CON PLOMO LOS EMPERADORES MÁS CHIFLADOS DE LA ANTIGUA ROMA?

Los romanos llamaban saturno al plomo, en honor al dios de la agricultura y la cosecha que devoró a sus hijos. Lo usaban en cantidades industriales para vertebrar su avanzado sistema de tuberías y para toda clase de obras de ingeniería. Se calcula que en el Imperio se llegaron a suministrar 1.500 litros de agua potable por persona cada día. Su maleabilidad, su abundancia y su aparentemente inmunidad a la corrosión lo hacían el material perfecto para los ingenieros romanos, si bien, como el Dios Saturno, el plomo también tenía un reverso letal. Hoy se define como saturnismo la intoxicación aguda o crónica por este elemento químico.
Como explica el autor de «Esto no estaba en mi libro de Historia de Roma» (Almuzara), los romanos desconocían por entonces que la exposición excesiva al plomo provoca graves efectos secundarios, entre ellos daños en el sistema nervioso central, convulsiones, anemia, hipertensión, disfunción renal, inmunotoxicidad y la muerte. En el caso de los niños, se ha constatado que incluso niveles de exposición débiles pueden afectar al desarrollo del cerebro y a una reducción del cociente intelectual.
Desde la antigüedad más remota, Plinio el Viejo asegura que el plomo servía para escribir en láminas u hojas de plomo y algunos autores mencionan volúmenes de plomo en los cementerios romanos y en las catacumbas de los mártires. Se empleaba para elaborar polvos faciales, ungüentos de todo tipo y colorantes blancos. Y algunos médicos recetaban directamente el plomo como método anticonceptivo y para algunas enfermedades cutáneas Se utilizaba también para las cazuelas donde se hervía jugo de uvas con el fin de prolongar la durabilidad de los vinos. El plomo disuelto daba lugar, a su vez, al «azúcar de plomo», un edulcorante que los ciudadanos de Roma llamaban «sapa» y usaban para endulzar sus alimentos y sus bebidas. Como consecuencia de esta mezcla explosiva, la cantidad de plomo por litro de vino llegó a alcanzar los 800 miligramos, según distintos estudios.
Todo ello tenía un efecto evidente sobre la salud, puesto que, cuando la exposición continuada supera a la capacidad de eliminación del organismo, este elemento químico empieza a distribuirse por el cuerpo hasta alcanzar el cerebro, el hígado, los riñones y depositarse en dientes y huesos. Allí se acumula entre los cristales de hidroxiapatita y su tiempo de vida puede ser de varias décadas.
Aufderheide detectó en 1985 en un estudio de esqueletos de 20 poblaciones entre el periodo etrusco y la Edad Media que el plomo se hallaba incluido en pequeñas dosis, con un pico en tiempos romanos y una pronunciada caída conforme las minas disminuían su producción
De ahí que muchos arqueólogos hayan buscado restos en los esqueletos del periodo. No en vano, el arqueólogo Arthur C. Aufderheide detectó en 1985 en un estudio de esqueletos de 20 poblaciones entre el periodo etrusco y la Edad Media que el plomo se hallaba incluido en pequeñas dosis, con un pico en tiempos romanos y una pronunciada caída conforme las minas disminuían su producción con el derrumbe de Roma. Del mismo modo, el análisis de las capas del hielo polar muestra niveles de plomo y cobre altos en la época romana, entre otras cosas porque las monedas también se componían de este material.

El vino, el plomo y la aristocracia

Especialmente a través del vino de calidad se extendió la gota saturnina entre las familias más nobles de Roma, lo que se traducía en una artritis doloroso debida a la acumulación del ácido úrico en el organismo. Hay quien ha relacionado este envenenamiento por plomo con la causa de la mala salud mental de algunos de los emperadores más terribles. La depresión, los dolores de cabeza, la agresividad y la pérdida de memoria –típicos síntomas del consumo crónico de plomo– encajan con algunos de los cuadros clínicos de Nerón, Calígula o Cómodo. A lo que habría que añadir la escasa fertilidad que pudo provocó este metal en políticos claves como Julio César, quien fracasó a la hora de dar un heredero varón a pesar de su incansable actividad sexual.
En cualquier caso, nunca se ha podido demostrar que la exposición al plomo provocara una disminución demográfica de lenta cocción que, hacia el siglo V, estalló con la caída del Imperio. Ni el plomo ni la llegada del Cristianismo ni una inflación disparada pueden explicar por sí solos el derrumbe de la civilización más compleja de la Antiguedad. De hecho, hubo quien detectó ya entonces los efectos tóxicos del plomo y desancosejó su empleo. El célebre ingeniero Vitruvio planteó en el siglo I a.C. la necesidad de usar otro material diferente para el transporte de agua. Asimismo, el médico Dioscórides (40-90 d.C.) describió en su obra «De Materia Médica» que el plomo hace a «la mente perezosa»...
 la muerte por ingesta de vino por las clase alta de Imperio Romano fue una de las mayores causas de esa parte de la población.
Algunos escritos dicen que la clase alta romana bebía de uno a cinco litros de vino al día, una práctica que bien podría dar como resultado la defunción por daño irreversible en el hígado (recordemos que hay que beber vino, sí, pero con moderación). Pero lo cierto es que el ‘saturnismo’ no se extendió por el hecho de beber vino sino por beber vino contaminado.
Durante la época romana el vino era transportado en vasijas de barro…. No como las de ahora, un recipiente que se encuentra especialmente de moda para la crianza de vino, sino vasijas de barro recubiertas de plomo en su interior.
¿Por qué plomo? Hay quien dice que las antiguas recetas de cocina romanas indicaban que “el vino debe hervirse a fuego lento en recipientes de plomo, ya que en las vasijas de cobre toma mal sabor; pero lo que no decían es que una ingesta habitual de vino en contacto con el plomo producía un progresivo envenenamiento llamado ‘saturnismo’ (los antiguos alquimistas llamaban al plomo ‘Saturno’ en referencia al Dios Griego que representaban como desequilibrado y agresivo).
Otras investigaciones apuntan que las ánforas eran impermeabilizadas y cerradas herméticamente con una masa que contenía plomo, aunque lo cierto es  otro de los elementos más usados era la pez. El plomo también es un potente fungicida y antimicrobiano.

DEMENCIA Y ALUCINACIONES
Sea como fuere, el caso es que el saturnismo fue una importante causa de muerte durante el Imperio Romano ya que, cuando el plomo llega al organismo, las enzimas lo convierten en sulfuro de plomo, lo que impide el transporte de oxígeno a la sangre y, por lo tanto, al cuerpo. El saturnismo provocaba anemia, alucinaciones y demencia; tal y como les ocurrió a los emperadores Tiberio, Calígula, Claudio o Nerón. En último término, el envenenamiento por plomo produce gota.
El vino se contaminaba de plomo por la cocción del mismo en el interior de las vasijas, tal y como indicaban las tradicionales recetas. Mediante la cocción del vino en contacto con el plomo, se obtenía el azúcar de plomo, el primer edulcorante artificial de la historia.
De esta manera, el resultado final era un vino más dulce de lo habitual. Esta bebida normalmente no siempre se tomaba sola, sino que se mezclaba con agua y con otras especias.
Hoy en día, las ánforas o vasijas de barro son un recipiente muy común que se emplea en la elaboración del vino, incluso algunas se meten bajo el mar. Pero el plomo es un elemento que sigue presente en nuestro día a día y sobre el que la OMS (Organización Mundial de la Salud) no deja de advertir sobre sus peligros.
Hay muchos productos que contienen plomo y que usamos habitualmente, como los cosméticos o las pinturas infantiles. El control en este sentido es extremo (no hay que alarmarse), pero no siempre fue así y artistas internacionalmente conocidos como Van Gogh, Beethoven o Goya murieron por enfermedades causadas por la exposición constante al plomo

ALEGATO CONTRA LA ROMANIDAD DEL ACUEDUCTO DE SEGOVIA

















Asistimos recientemente a una auténtica revolución histórico arqueológica que podríamos bautizar como "La primavera de las dataciones".

Las presas de Cornalvo y Proserpina, la muralla de León y la de Lugo, el acueducto de Mérida, magnas obras de ingeniería que se tenían por romanas han sido convenientemente revisadas y pese a la alhacara y el revuelo de algunos insurrectos al conocimiento científico lo cierto es que se ha abierto un debate académico que amenaza con rebajar ostensiblemente el legado arquitectónico de la romanización.

He aquí algunos de los principales jalones de "La primavera de las dataciones"

DIARIO DE LEÓN : La muralla de León no es romana ni del siglo IV.

DIARIO HOY: Las presas de Cornalvo y Proserpina no son romanas.

DIARIO EL PAÍS: El monumento romano que era visigodo.

DIARIO EL PROGRESO: Lugo no fue fundada por los romanos.

DIARIO EL COMERCIO La muralla de Gijón no es romana sino medieval.

Llegados a este punto cabe preguntarse por la paternidad de uno de los monumentos más singulares que existen en la Península "el acueducto de Segovia" porque existen serias y fundadas dudas sobre tal paternidad como veremos a continuación.

En primer lugar existe un auténtico guirigay sobre la datación romana del edificio, los especialistas no se ponen de acuerdo a pesar de multitud de estudios que se han hecho sobre tan emblemático edificio. No hay quorum acerca de en que época del Imperio Romano se habría alzado y dicha problemática es toda una señal premonitoria de lo que viene a continuación.

Según el aqueólogo Jorge Díaz, el acueducto de Segovia, el Arco de Medinaceli, las murallas de Carmona, entre otros muchos monumentos, son vestigios prerromanos ya que la juntura de los bloques de estas construcciones se encuentran fundidas de tal manera que no se advierte la unión entre ellos. En los monumentos de granito para que se produzca este fenómenos de erosión y compactación, hasta que desaparezcan las uniones entre los bloques, se necesita un tiempo superior a los 10.000 años. Por otra parte en el acueducto de Segovia aparecen inscripciones en grafía tartésica lo que indica que no pudo ser nunca una construcción romana, sino anterior porque los romanos construyeron su primer acueducto trescientos años después de la dominación de Hispania. Manuel Bendala, historiador de la Universidad Autónoma de Madrid, afirma que Hispania ya estaba totalmente urbanizada antes de la llegada de los romanos.




















Estos estudiosos afirman que diversas edificaciones antiguas de España no tendrían el origen que la historia oficial pretende.
Tanto en el Acueducto de Segovia como en otras edificaciones sospechosas en cuanto a su romanidad  las junturas de sus piedras han llegado a ensamblarse de tal forma con el paso del tiempo que permiten datar su antigüedad en varios de miles de años antes de la llegada de los romanos a España, pese a que la ciencia oficial insista en atribuir a estos su autoría.  En estos edificios, los diferentes bloques de roca que los componen han llegado a ensamblarse totalmente, perdiéndose la línea original o juntura, debido al efecto natural de la meteorización y la diagénesis, esto es, el conjunto de cambios físicos, químicos y biológicos mediante los cuales los sedimentos se transforman en rocas sedimentarias con el paso del tiempo. Para que una roca eruptiva como el granito se compacte y cristalice de forma natural tendría que transcurrir mucho mas tiempo que los 2000 años que les atribuyen. Según estos expertos, el tiempo necesario para provocar este fenómenos sería aproximadamente de 11.0000 años.

Está claro que los supuestos monumentos romanos en Hispania son un campo de minas. Es necesario someter el acueducto de Segovia a una pormenorizada y escrupulosa investigación con especialistas nacionales y extranjeros que empleen los últimos adelantos tecnológicos para salir de dudas.

El PSOE en el Ayuntamiento de Mérida se instala en el negacionismo y utiliza su mayoría absoluta para ir en contra de todo aquel que dude del origen romano de su Acueducto


















EXTRACONFIDENCIAL.COM  por Fernando Verea.



La Universidad Autónoma de Madrid, tras realizar pruebas de termoluminiscencia a uno de los ladrillos de la construcción, ha asegurado que la fábrica del acueducto data, por lo menos, del siglo IV.
Cuentan las escrituras que, en algún momento de los imperios de Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio, Nerón, Vespasiano, Tito o Dominiciano, o lo que es lo mismo, en algún momento de las dinastías Julio Claudia o Flavia, fue levantado el Acueducto de los Milagros para transportar agua del embalse de Proserpina a cinco kilómetros de la antigua ciudad de Mérida en España. Ese es su origen, o al menos el que se creía hasta ahora, la ciudad de Emérita Augusta, capital de la provincia Lusitania en el Imperio Romano del siglo I
Quien ha puesto la génesis de esta obra de ingeniería civil en entredicho ha sido la Universidad Autónoma de Madrid que, tras realizar pruebas de termoluminiscencia a uno de los ladrillos de la construcción, ha asegurado que la fábrica del acueducto data, por lo menos, del siglo IV, alejando de la obra su carácter romano y acercándolo al período tardoantiguo, casi insertado ya en la Edad Media. Unas sospechas que se unen a las ya percibidas en el año 2011 cuando se llevaron a cabo otros análisis en Alemania que establecieron la fecha de construcción del acueducto en torno al año 560, ya en plena época visigoda.

Un rico debate histórico y arquitectónico

El que ha echado más leña al fuego ha sido el ingeniero técnico de Obras Públicas, geógrafo e historiador, Isaac Moreno Gallo, que ha reconocido sin tapujos que el acueducto no es romano, sino visigodo contextualizando además el momento de su levantamiento y adjudicándoselo a arquitectos bizantinos tras la derrota del rey visigodo Agila I a manos del rebelde Atanagildo apoyado por las tropas del emperador Justiniano.
Todo este rico debate histórico y arquitectónico, alimentado con detalles de vasta cultura, ha sido despedazado por la Administración municipal, que, como si una caza de brujas del siglo XV se tratara, ha amenazado con que tomará las medidas oportunas sobre todo aquel que dude del origen romano del acueducto. En palabras de la portavoz del Ayuntamiento de MéridaCarmen Yáñez,  “estudiaremos qué vías tiene el Ayuntamiento para, a través del gabinete jurídico con el apoyo de los técnicos del Consorcio, ver a qué personas o entidades tenemos que acudir para que se retracten o rectifiquen en la información que han publicado y están defendiendo”.
El Ayuntamiento de Mérida está gobernado por el PSOE desde 2015 siendo su alcalde Antonio Rodríguez Osuna. En las elecciones autonómicas de 2019 recibió 13.703 votos, obteniendo la mayoría absoluta con 14 concejales que se han instaurado en el negacionismo.

El acueducto romano podría no serlo

El Consorcio de la Ciudad Monumental y su director Félix Palma, también apoyan este negacionismo al defender con uñas y dientes la teoría romana del acueducto de una manera peculiar. La tesis del director del Consorcio apunta que el estudio de la Universidad de Palma parte “de un ladrillo al que se le ha aplicado la termoluminiscencia, que estudia la última cocción que tuvo ese ladrillo” y que ésta podría datar de las fechas en cuestión porque el ladrillo habría sido colocado durante una reforma. Además, añade que “el Informe que ha hecho la Universidad Autónoma de Madrid dice que ese material es del año 290 con un error de más, menos 106 años. Es de aquí desde donde han montado esta teoría que no ha tenido en cuenta el resto de estudios y conocimientos que se tienen sobre el monumento”.
El autor del libro “Una cruz demasiado pesada: el Papa Pío XII y los judíos de Europa”, Paul O´Shea, definió el negacionismo como “el rechazo a aceptar una realidad empíricamente verificable. Es en esencia un acto irracional que retiene la validación de una experiencia o evidencia históricas”. Atendiendo a esta definición, el PSOE de Mérida está siendo irracional al evadir una verdad incómoda empíricamente verificable: el acueducto romano podría no serlo.
Fernando Verea

lunes, 25 de noviembre de 2019

¿FUE JULIO CESAR GAY? EL ESCÁNDALO QUE SACUDIÓ LA ANTIGUA ROMA















DIARIO EL ESPAÑOL

¿FUE JULIO CESAR GAY? EL ESCÁNDALO QUE SACUDIÓ LA ANTIGUA ROMA

Los rumores de que se dejó sodomizar, cuando era joven, por el rey de Bitinia, persiguieron al dictador toda su vida. Él siempre lo negó.



Así, con esos calificativos, trataron los enemigos del dictador y gran general romano de calumniarle, de difamarle para que su figura entre el pueblo perdiese respeto. A lo largo de su vida, recordaron continuamente
 la historia del supuesto escándalo sexual, cuando era joven, con otro varón. No les importaba determinar si había sido cierto o no, si Julio César yació realmente con un hombre que le habría sometido, sino extender el rumor lo máximo posible, utilizarlo como mecanismo de destrucción personal y política.Julio César
, reina de Bitinia. Julio César, el hombre de todas las mujeres y la mujer de todos los hombres. Julio César, almohada de la litera real.
Así, con esos calificativos, trataron los enemigos del dictador y gran general romano de calumniarle, de difamarle para que su figura entre el pueblo perdiese respeto. A lo largo de su vida, recordaron continuamente la historia del supuesto escándalo sexual, cuando era joven, con otro varón. No les importaba determinar si había sido cierto o no, si Julio César yació realmente con un hombre que le habría sometido, sino extender el rumor lo máximo posible, utilizarlo como mecanismo de destrucción personal y política.
¿Pero dónde se encuentra las raíces de este cuento? ¿Era el militar más poderoso de Roma realmente homosexual? Décadas antes de hacerse con el poder absoluto, Julio César, a los 19 años, siendo todavía un joven poco experimentado, fue enviado a Bitinia, un reino aliado de la República en la costa de la actual Turquía, en misión diplomática: su tarea consistía en reunir un escuadrón de barcos para atacar Mitilene, en la isla de Lesbos.
En este viaje conoció a Nicomedes IV, rey de Bitinia, quien le recibió con especial afecto por haber sido amigo de su padre. Lo único cierto es que César empleó bastante más tiempo del necesario en ese reino aliado. Sus enemigos, con el tiempo, interpretarían la demora como una prueba irrefutable de que había sido seducido por el monarca. "Según los rumores, César habría sido conducido a los aposentos reales, donde se habría tumbado en un lecho dorado cono colcha púrpura sobre la que Nicomedes le habría sodomizado", relata el divulgador cultural Néstor F. Marqués en su libro Fake news de la Antigua Roma (Espasa).
La burbuja del escándalo, no obstante, se hizo todavía más grande cuando trascendió que César, poco tiempo después de este encuentro, había regresado a Bitinia para supervisar los negocios de uno de sus libertos, según dijo él mismo. La llama estaba ya prendida: estas versiones, avivadas por sus enemigos, retrataban a Julio César como un amante pasivo, lo que era visto en la Antigua Roma como una actitud debilitante y propia del género femenino. Y por eso este episodio, que siempre negó, fue tan doloroso para él.
"Aunque es difícil establecer con seguridad absoluta qué ocurrió en Bitinia realmente, y aceptando que podría haber sido un joven deseo de explorar su sexualidad, parece posible que todo aquello no fuera más que una gran artimaña para desprestigiarle, puesto que no se le conoció ningún otro escándalo similar durante el resto de su vida y recordar aquel rumor era una de las pocas cosas que conseguían enfurecerle en público", añade Marqués.

Afeminado y mujeriego

El escándalo sexual le perseguiría a lo largo de toda su vida, pero no por ello dejó de ser aireada la afición de César por las mujeres. Aunque por conveniencia política y no por amor, se casó en tres ocasiones; y tan solo su primer matrimonio con Cornelia le dio una hija, a la que llamaron Julia y que enlazaría con Pompeyo, a la postre uno de sus grandes enemigos.
"Todo el mundo está de acuerdo en que fue muy dado a los placeres sexuales y manirroto para conseguirlo, y que sedujo a muchas mujeres de la nobleza", relata Suetonio en Vidas de los doce Césares citando a cinco amantes -aunque el affaire más famoso del dictador se produjese con Cleopatra, con quien se supone que tuvo un hijo, Cesarión-.
De hecho, el tribuno de la plebe Helvio Cina llegó a extender el rumor, fuera cierto o no, de que César le había ordenado redactar una ley que le permitiese casarse con cuantas mujeres deseara, aunque aseguraba que se debía a una cuestión meramente reproductiva: engendrar un heredero varón.
En cuanto a su aspecto físico, Julio César, que fue el primer romano en vida que se atrevió a inmortalizar su efigie en monedas, fue un hombre alto, esbelto, de tez clara, con los pómulos prominentes y unos ojos oscuros y profundos. Según los relatos de la Antigüedad, se cortaba el pelo, se afeitaba y se depilaba regularmente para estar perfecto en cualquier situación, lo que le granjeó ciertas sospechas de afeminamiento.
Pero su mayor complejo tenía que ver con la calvicie: se peinaba siempre hacia delante y agradeció infinitamente la concesión del Senado, al final de su vida, de poder llevar la icónica corona de laurel bajo cualquier circunstancia. Así, su cabeza quedó protegida de posibles miradas indiscretas, pero no le las puñaladas que acabaría cercenándole la vida en el año 44 a.C

El palacio de perversión y "placeres monstruosos" del emperador Tiberio que escandalizó a Roma















DIARIO EL ESPAÑOL

El emperador se marchó de la capital y ordenó construir una villa en Capri donde entrenaba a niños para cumplir sus deseos sexuales.



De hecho, en el año 26, poco después del fallecimiento de su hijo y sucesor Julio César Druso, decidió exiliarse por voluntad propia.
 Necesitaba huir de la capital. Así, dejó la administración en manos de sus dos prefectos pretorianos. Bajo esta solitaria y alejada nueva vida, tanto el pueblo como los miembros del Senado comenzaron a especular sobre su rutina y a preguntarse qué sucedía con el emperador.Fue el 18 de septiembre del año 14 d.C. cuando Tiberio Julio César asumió el cargo de emperador del Imperio romano. Durante su juventud había sido uno de los generales más brillantes de Roma que consiguió estabilizar la frontera al norte de del imperio. Sin embargo, tal y como escribió el historiador Plinio el Viejo, nunca quiso heredar el título tan codiciado de emperador y lo llamó "el más triste de los hombres".
De hecho, en el año 26, poco después del fallecimiento de su hijo y sucesor Julio César Druso, decidió exiliarse por voluntad propia. Necesitaba huir de la capital. Así, dejó la administración en manos de sus dos prefectos pretorianos. Bajo esta solitaria y alejada nueva vida, tanto el pueblo como los miembros del Senado comenzaron a especular sobre su rutina y a preguntarse qué sucedía con el emperador.
De esta manera, el historiador romano Suetonio fue el encargado de escribir la biografía de Tiberio. En sus escritos dejó constancia de la villa que había ordenado construir en Capri. Dicho complejo arquitectónico no tenía la función de albergar el descanso de las gentes que vivían allí. Tiberio había edificado todo un palacio pornográfico. Tras los muros de la villa tenían lugar todo tipo de prácticas sexuales sadomasoquistas y pederásticas.





Restos de la villa de Tiberio.
"Un grupo elegido de muchachas, de jóvenes y de disolutos, inventores de placeres monstruosos, y a los que llamaba sus maestros de voluptuosidad, formaban allí entre sí una triple cadena, y entrelazados de este modo se prostituían en su presencia para despertar, por medio de este espectáculo, sus estragados deseos", escribió Suetonio. Pero las macabras apetencias del emperador no se detenían ahí. "Se dice que había adiestrado a niños de tierna edad, a los que llamaba pececillos, a que jugasen entre sus piernas en el baño, excitándole con la lengua y los dientes, y también que, a semejanza de niños creciditos, pero todavía en lactancia, le mamasen los pechos, género de placer al que por su inclinación y edad se sentía principalmente inclinado", añadió el romano en su biografía.