viernes, 30 de abril de 2010

LA DESTRUCCIÓN PLANIFICADA DE LA CULTURA CASTREÑA





Llagú, La Forca, La Carisa; recientes ejemplos de la destrucción sistemática de la cultura astur prerromana entre otros muchos que seria prolijo enumerar y al que ahora se suma el de la Campa Torres.

El yacimiento de la Campa Torres era de singular importancia pues en la zona central de Asturias y a diferencia del Occidente apenas se ha excavado y estudiado a conciencia la cultura castreña destruída por todo tipo de infraestructuras, canteras, repetidores y todo ello ante la indiferencia general de nuestras autoridades.

El castro de la Campa Torres era pues uno de los pocos de la zona central de Asturias que habia sido excavado y estudiado en profundidad.

Pues bien la mayor parte de los materiales arqueológicos y que en conjunto sumaban mas de veinte mil piezas fue localizado para verguenza de los responsables que como ya es habitual se acusan unos a otros en una especie de zulo donde durante todos estos años se han ido pudriendo y desclasificando sin remedio.

Sí señores puede parecer increíble pero es cierto. Las excavaciones fueron dirigidas por el ya fallecido Jose Luis Maya y por Francisco Cuesta a quien reciéntemente han puesto al frente del museo de Grandas de Salime tras defenestrar al fundador y alma máter del mismo Pepe el Ferreiro y a quien los vecinos de la comarca del Occidente asturiano le habían legado a título personal todo tipo de patrimonio etnográfico procedente de sus caserías; patrimonio de gran valor y que habían convertido el museo de Grandas en un referente a nivel nacional e internacional.

Este señor Don José Naveiras Escanlar fue defenestrado con acusaciones forzadas y difíciles de probar y muchas veces falsas como se probó en la comparecencia de la consejera de cultura en la Junta General del Principado.

Fue defenestrado asimismo en contra de la voluntad popular no ya de Grandas y el Occidente sino de Asturias entera que se alzó contra tal acto despótico y de villanía llegando a sumarse a la protesta gente de toda España e incluso de las comunidades asturianas emigrantes y de personas de otros países con inquietudes culturales o que conocían de primera mano el museo de Grandas.

Naturalemente el señor Cuesta flamente nuevo director del museo de Grandas y que por llevar corbata ya triplica el sueldo del anterior niega cualquier tipo de responsabilidad en el asunto pues dice "que hace milenios que no pasa por ahí".

Este señor protegido de la señora Carmen Fdez Ochoa, catedrática de la U.A.M y que dirige con mano de hierro la política cultural asturiana fabricando un pasado romano hipertrofiado por cuestiones políticas ¡niega cualquier responsabilidad en el asunto! pero hete aquí que la actual directora Paloma García que lo es desde el año 2000 dice que naranjas de la china y textualmente cito sus palabras:

"Me ocupo del parque, pero los responsables de los materiales procedentes de una excavación son los arqueólogos que la dirigen, así lo recoge la ley de Patrimonio». «Ellos son los responsables hasta que hacen la entrega y en este caso ni el Ayuntamiento de Gijón ni la Consejería de Cultura tenían constancia de su entrega». "

Y a continuación suelta la siguiente frase que no tiene desperdicio:

"El Ayuntamiento de Gijón es especialmente cuidadoso con las colecciones arqueológicas, de las que siempre se hace un inventario para después, en la mayoría de los casos, hacer un seguro a las piezas. Pone como ejemplo las procedentes de las excavaciones de la fábrica de salazones, de Veranes o Cimadevilla, yacimientos cuyas colecciones se custodian en las mejores condiciones, tras ser depositadas por los responsables de la excavación."

Naturalmente para los que no estén al tanto de la situación Veranes y Cimadevilla son yacimientos de la cultura romana especialmente mimados por nuestras autoridades y no de la cultura castreña prerromana que es agredida un dia si y otro también.

En dichos yacimientos se han gastado cantidades ingentes de dinero mientras los castros astures son arrasados sistemáticamente y los monumentos prerrománicos de la Monarquía Astur tratados como perreras.
Naturalmente ya ha saltado a la palestra la señora Fdez Ochoa desde el campus madrileño de Cantoblanco diciendo que tampoco ella tiene nada que ver con el yacimiento de la Campa Torres. Hace no mucho tiempo también dijo que no tenía nada que ver con el famoso dictamen científico-técnico del yacimiento de Iruña Veleia donde habia estampado su firma junto a Morillo Cerdán.

Asi pues queda claro que nadie tiene que ver y si acaso la culpa es de los enseres por no ser obedientes y despistarse.

Afortunádamente en el mundo de la arqueología no todo es del mismo color negro y existen profesionales que con su actuación son acreedores al respeto y al reconocimiento y quizás por ello también son marginados por el "stablishment".

Los señores Jorge Camino y Miguel Ángel de Blas están entre ellos y sus declaraciones ponen un punto de cordura en toda esta inmensa cobardía: "la destrucción de datos por falta de catalogación de los objetos supone la pérdida de un montón de materiales que se quedan sin valor científico."

Por supuesto la señora Fdez Ochoa de inmediato ha ido a socorrer a su protegido desde su trono madrileño de Cantoblanco rodeada de los famosos paracaidistas de la U.A.M. acusando a la actual directora de ser la única responsable con la siguiente declaración: "la responsabilidad de los materiales arqueológicos es del director mientras los tenga en depósito para su estudio."

Al margen de si uno u otro de todos estos tarambainas es mas o menos culpable lo que está claro es que todos ellos, al menos de oídas conocían algún detalle acerca de esta siniestra actuación que ha arruinado otra joya de la cultura astur castreña.

Para finalizar decirles que durante mucho tiempo estuvieron intentando colar que todos los castros eran de la época de los romanos; no les salió bien la operación y tampoco les va a salir bien la de intentar sustraer los monumentos prerrománicos de la mano que ordenó levantarlos aunque pueda que los destruyan también y en eso están.
Y para finalizar y por mucho que les pese a algunos las murallas de Teverga y del Homón están datadas entre los años 650-710 átenme esa mosca por el rabo.

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