sábado, 18 de julio de 2009

HOMENAJE A GUILLERMO M. LOPEZ CAP I


LAS TERMAS ROMANAS Y EL CAMPO VALDÉS
LA ESCASA ROMANIZACIÓN DE ASTURIAS POR GUILLERMO M. LOPEZ
HOMENAJE A GUILLERMO M. LOPEZ
En la página 151 del tomo III de la Historia de España (Ed. Gredos), del que son autores J.M. Blázquez, A. Montenegro y J.M. Solana, leemos: "Los montañeses indómitos fueron derrotados y exterminados, en particular los jóvenes aptos para el servicio de las armas, obligando a los restantes a bajar al llano. Lo mismo ocurriría en el frente astur."
S. Montero, G. Bravo y J. Martínez-Pina, escriben en la página 41 de su obra "El Imperio Romano" : "La guerra fue larga y difícil. Augusto dirigió las operaciones en la campaña 26/25 A.C., pero a pesar de los grandes recursos invertidos, los resultados no fueron plenamente satisfactorios. Tan sólo después de una auténtica guerra de exterminio, Agripa consiguió en el año 19 A.C. dar por terminadas las operaciones. Sin embargo, el territorio no quedó totalmente pacificado, pues exigió el estacionamiento en la región de tres legiones."
Se mencionan estos hechos incluso en obras generales como la Gran Historia Universal, en el tomo IV, El Imperio Romano (Ed. Nájera,1987), del que son autores A. Montenegro, F. Lara, G. Fatás, R. López, M. Pastor, J. F, Rodríguez, A. del Castillo y F. Marco, en cuya página 218 leemos: "La lucha en ese años (19 A.C.) fue feroz y Agrippa practicó un auténtico genocidio frente a la desesperada resistencia cántabra."
Naturalmente, carece de sentido aplicar los actuales límites administrativos de Asturias a cualquier consideración sobre épocas antiguas. El territorio de los cántabros comenzaba, según opinión general, en el Sella, y en las fuentes clásicas el término "Cantabria" se utiliza a veces en sentido lato, extendiéndolo a toda la región norteña. Por eso yo hablé de astures y cántabros o de "asturcántabros".
Pero, volviendo a lo que usted decía, ya ve cuántos "nadies" hay que comparten lo que yo expuse en noviembre. Todos son especialistas en Historia Antigua hispana y romana, y entre ellos están precisamente los más prestigiosos. Por favor, no deje de contarnos en su próximo escrito si hay alguien que comparta la visión que usted nos dio en octubre.
OTRAS ATROCIDADES ROMANAS
Lo mismo puede decirse de los otros datos que yo cité, como los suicidios colectivos, las crucifixiones, las mutilaciones de los prisioneros, etc. que recogen igualmente la mayoría de los autores. Incluso su compañera de universidad doña Carmen Fernánde Ochoa (Boletín del IDEA, Nº 104, página 715) menciona el hechode que los romanos cortaron las manos a los astures prisioneros, pero llama a las matanzas "ajusticiamientos drásticos" arrasando el país". Eso ya es algo mas concreto que los "episodios violentos" de que usted tan vagamente habla ahora, (y a los que ni siquiera aludió en Octubre), pero es incorrecto, pues un ajusticiamiento supone un procedimiento judicial y una sentencia. Podría considerarse como tal, por ejemplo, el macabro simulacro de juicio que efectuó César antes de matar en el suplicio al jefe de los senones, Acco. Pero las legiones romanas no realizaban normalmente "ajusticiamientos" de los vencidos ni meros "episodios violentos", sino verdaderas matanzas, asesinatos masivos, con frecuencia sin justificación alguna, rompiendo acuerdos y tratados. Y los mismos historiadores romanos no silenciaron estas atrocidades.
Por ejemplo, no silenció Tito Livio cómo fueron degollados los habitantes de la ciudad de Iliturgis en la Hispania Ulterior. No silenció Apiano la perfidia de Lúculo asesinado a traición a los 20.000 habitantes de Cauca, en Segovia, tras permitir éstos la entrada a las tropas romanas como garantía de paz. Ni tampoco la atroz alevosía de Galba, que hizo reunir a los lusitanos con sus familias (en número de 30. 000 según Suetonio), ofreciéndoles tierras, y tras concentrarlos indefensos en tres cercados, los asesinó en masa. Una "hazaña" semejante la repitió más tarde Didio, con la aquiescencia de los legados presentes, pasando a cuchillo a todos los hombres, mujeres y niños vecinos de los celtíberos colendanos, tras hacerles entrar en la empalizada con la promesa de repartirles tierras (por ello Didio recibió los honores del triunfo). O Valerio Flacco, haciendo degollar a 20.000 hispanos en la ciudad celtíbera de Belgeda. Ni siquiera el propio Julio César silenció cómo sus tropas asesinaron a los 40.000 habitantes galos de Avaricum, sin perdonar a los ancianos, las mujeres ni los niños.
Tampoco silención Dión Casio, al narrar la conclusión de las guerras cántabras, que Agrippa exterminó a todos los enemigos en edad de empuñar las armas.
¿porqué quiere silenciarlo usted? ¿Se identifica usted de tal modo con su especialidad que se siente impelido a "justificar" de esa manera las acciones execrables del ejército romano, diciendo, como dijo, que "nunca fue una conquista a ultranza, a sangre y fuego, sino un proceso de adaptación"? ¿O, simplemente, emplea la táctica de "minimizar" todos los hechos históricos que puedan empañar la imagen de "gloria" del Imperio, no vaya a ser que los gijoneses se vuelvan críticos y consideren inadecuados los sentimientos de "orgullo" y "honor" que usted pretende expresamente inculcarles para que admitan la plataforma de hormigón en el Campo Valdés?
Podrían escribirse cientos de páginas simplemente con las noticias históricas que los propios autores romanos nos trasmiten de las atrocidades, matanzas y crueldades gratuitas, esclavizaciones, devastaciones y exacciones que cometieron los romanos en todos los territorios conquistados. Un prestigioso especialista moderno Yann Le Bohec, en su reciente obra "Larmee romaine" (Picard Ed., París 1989) considera que el ejército y la guerra fueron los únicos móviles de lo que se llama romanización.
En Asturias no se estableció jamás ninguna colonia romana, sino simplemente un ejército que fue allí a explotar las riquezas de la región, tras masacrar, someter y esclavizar bestialmente a los antiguos pobladores.
Respecto a mi manejo de las fuentes clásicas, no pretenderá ustedque realice en EL COMERCIO una "lectio difficilior" de los respectivos códices y palimpsestos. Esto lo está intentando en la actualidad el Departamento de Ciencias Históricas de la Universidad de Santander. Y uno de sus miembros, M. A. Marcos García, califica la obra historiográfica de Dión Casio como la fuente básica sobre las guerras cantábricas; alaba su calidad meritoria, la sólida formación y el tesón de Casio en consultar todas las fuentes anteriores y dice que "sobresale por méritos propios" (Studia Historica-Historia Antigua, volumen VI, Ed. Univ. Salamanca 1988,página 92). Pues bien Dión Casio es precisamente quien menciona el exterminio que practicó Agripa en el Norte.
Pero lo grave de sus palabras no es el nuevo intento "punitivo" de que usted pretende vanamente hacerme objeto. Eso no tiene la menor importancia, pues ya vemos a qué queda reducido. Lo verdaderamente grave es que con ellas está acusando usted también implícitamente a todos los historiadores arriba citados de un manejo "torpe" y "sin crítica alguna" de las fuentes.
En cuanto a la obra de Pastor Muñoz "Los astures durante el Imperio Romano", lo que yo escribí sobre ella puede usted encontrarlo en las páginas 89-94. Por lo demás, Pastor Muñoz califica la dominación romana de "superestructura". Por ejemplo, en la página 139 escibe: "La dominación romana, en el territorio de los astures fue, a nuestro entender, una superestructura, es decir, que actuó sobre él, pero sin profundizar en el trasvase de sus organizaciones; su interés primordial consistía en someter dicha región por los intereses económicos, sobre todo mineros, que le reportaba, y de aquí que no consiguiera hacer desaparecer sus organizaciones gentilicias, ni, en general, la vida indígena, como ocurrió en otras regiones del territorio hispano, en la Bética, por ejemplo."
Y en las páginas 152-153 subraya la total inexistencia en el territorio astur de ciudades auténticamente romanas, y la ausencia, incluso en la capital Astúrica Augusta, de edificios públicos y privados de cierto relieve y signo auténticamente romano, lo que demuestra que "el grado de urbanización y romanización que experimentó el territorio astur fue muy escaso y en algunas zonas completamente nulo".
Y concluye que la escasísima municipalización "nos muestra claramente cuán poco interés tenía Roma en realizar una verdadera y auténtica política urbanizadora en los territorios astures." Destaca que, incluso tras la concesión del Ius Latii a Hispania, los indígenas astures seguían siendo más rentables a los dirigentes romanos como "mano de obra, principalmente para la producción minera y para el ejército."
En esas mismas ideas insiste Pastor Muñoz años después en otros trabajos (por ejemplo en el II Seminario de Arqueología del Noroeste, junto con J. Carrasco).
LA ROMANIZACIÓN: EL MINERO Y EL SOLDADO
Prosigue usted: "Lo que yo dije es que en Asturias hay una fase histórica interesantísima, como en otros sitios de España (Galicia, Cantabria,País Vasco, Castilla) y de Europa (Britania, Germania Libre, etc.). El mantiene la escasa romanización de Asturias y, lo que es peor, su dureza sanguinaria y explotadora. Para ello recurre a los episodios de la sórdida vida en la mina o al soldado astur que, lejos de su patria, al menos puede respirar el fesco aire de Germania, todo ello con una prosa lírico-bailable, muy de efectos especiales, pero de escaso rigor histórico."
Usted no se expresó en octubre como ahora pretende, pero es de agradecer que trate de mejorar aquí el discurso propagandístico que realizó entonces. Aunque asombra su afirmación de que ha pasado inadvertida nada menos que una fase histórica en todos esos sitios. Seguro que pasó inadvertida hasta que usted nos advirtió. Probablemente por eso se esforzó usted tanto en cantarnos las excelencias de la "máquina de romanizar" y "la floreciente legalidad romana", para defender la cual llegaron las legiones. Si no llega a hacerlo usted, seguramente seguiría "inadvertida".
El carácter sangriento de la conquista romana es un hecho incuestionable. ¿O acaso las legiones se comportaron en las guerras del Norte de forma distinta a como hacían en otras partes? Y bien sabemos cual era ese comportamiento. En el Norte alcanzó sin duda, un carácter extremo con las matanzas de Agripa, pero también los lusitanos y los celtíberos fueron víctimas de masacres similares, que llegaron al exterminio de poblaciones enteras, como acabo de recordarle. Y es bien sabido que lo mismo aconteció en muchos otros lugares conquistados por el Imperi.
Pero parece que le traiciona a usted su subconsciente, cuando dice "...y, lo que es peor..." ¿Por qué es "peor" reconocer el hecho histórico innegable de la conquista sangrienta? Usted lo negó en octubre, poniéndose así al margen de la Historia. Si su identificación personal con el Imperio Romano ha llegado a tal punto que le hace a uste "odiar" a quienes lo consideran imperialista, como usted mismo confesó, no es de extrañar que quiera usted negar el carácter sangriento de la conquista y la dura explotación subsiguiente. Pero eso nada tiene que ver con la Historia, sino con los particulares intereses y vivencias de usted.
La escasa romanización de Asturias no es una tesis que yo necesite sostener, se sostiene por sí sola. Es un hecho incuestionable que ahí está y que reconocen todos los estudiosos del tema, y eso lo sabe usted perfectamente. ¿Qué autor español o extranjero afirma lo contrario? Podría llenar docenas de páginas con citas de todos los especialistas en este sentido, que emplean adjetivos como "epidérmica, marginal, escasa, superficial, bajísima", etc. Pero es del todo superfluo. En realidad es ridículo discutir siquiera este hecho. Por eso, voy a limitarme a citar una frase lapidaria (entre tantos semejantes) de uno de los mas prestigiosos especialistas de la Hispania romana, J.M. Blázquez, que en uno de sus actualizados "Nuevos estudios sobre romanización" afirma taxativamente: "La escasa romanización de los astures, cántabros y vascones está confirmada por todos los investigadores que trataron este tema".
En otro estudio, afirma Blázquez lo mismo que expresan Pastor, Roldán y otros autores, que a Roma no le interesó nunca que los pueblos del Norte del Duero asimilaran la cultura romana. "Sólo interesaban estos pueblos como cantera de reclutamiento para las legiones y la explotación de las minas."
Pero el concepto de romanización es en realidad impropio, como ya hace mucho que demostraron Rostovtzeff, Pflaum y Broughton, pues se bas en criterios extraídos de la expansión colonial europea del siglo XIX que los romanos nunca tuvieron. Con más propiedad debería hablarse de "asimilación", como es usual en los autores ingleses. El mismo Blázquez lo hace en varios trabajos, aunque generalmente siga empleando el término tradicional por costumbre. Así, por ejemplo, afirma que en el Norte hispano "la asimilación de la cultura romana era totalmente epidérmica, salvo en ciudades como Astúrica Augusta, Flavióbriga y Pompaelo". Y en otro lugar: "El panorama que se desprende del territorio astur trasmontano es la bajísima asimilación de la cultura romana en los castros, el mantenimiento de las instituciones y de la economía indígenas, la no generalización del urbanismo de tipo romano, las nulas consecuencias prácticas en todo el Norte de Hispania de la extensión del Ius Latii por Vespasiano y de la ciudadanía por Caracalla." Insiste enq ue esa política de Roma con los astures era la misma que utilizó en otras regiones como Dalmatia, el Noricum, Siria o Tracia, manteniendo a esos pueblos con sus tradicionales modos de vida a fin de poder contar con tropas auxiliares para las legiones.
Y otro gran especialista, J.M. Roldán, considera incluso absurdo emplear la palabra "romanización". En su excelente obra "Hispania y el ejército romano", hablando del Noroeste hispano, afirma que para Roma era "un territorio súbdito, cuya dominación interesaba bajo el exclusivo punto de vista económico, como vivero de hombres y materiales y sin ninguna política consciente de elevar el nivel de vida económica y social de sus habitantes. En este sentido lo poco logrado en este cuadrante Noroeste se realizó más en contras que a favor de esta política, debido casi exclusivamente al contacto de los soldados permanentemente instalados en el centro del territorio durante todo el Imperio y la acción ejercida por los centros de administración romanos: Astúrica, Bracar y Lucus. Es pues absurdo emplear la palabra romanización, que nunca tuvo ningún significado, ni en ninguna mente gobernante encontró asilo:sólo la prolongada dominación y los contactos pacíficos, una vez dominados o frenados los intentos de rebelión, produjo estos mediocres resultados de una híbrida civilización de tinte romano, donde unca dejó de existir de forma vigente el espíritu autóctono."

ALFONSO FROILAZ, EL ÚLTIMO REY DE ASTURIAS


























En esta lápida que se encuentra en el museo prerrománico de Salas se menciona a Adefonsus Confes so, identificado con Alfonso Froilaz, hijo de Fruela II rey de Asturias a la muerte de Alfonso III el Magno y posteriormente del reino unificado de León a la muerte de sus hermanos Garcia I y Ordoño II.
El último gran rey asturiano Alfonso III el Magno había dividido el reino entre sus tres hijos correspondiendo León a Garcia I, el primogénito, Galicia a Ordoño II y Asturias a Fruela II.
La división reconocía la existencia de tres territorios lo suficientemente diferenciados como para otorgárseles la categoría de reinos pero sujetos todos ellos a León, la ciudad imperial, sucesora de Oviedo.
Por lo tanto el rey que ostentase el cetro en León era el superior en rango jerárquico. Asi pues la división del reino se produce de facto hasta cierto punto.
Dejando aparte esta lápida que se conserva en el concejo de Salas, vamos a centrarnos en otra de mucho mayor interés que apareció incrustada en la Iglesia Parroquial de Santa Eulalia del Valle, concejo de Carreño.












OB HONOREM SANCTI PETRO ET PAULO APOSTOLORUM SANCTI IN ALTARE RELIQUIE RECONDITE S. TIRSI?SANCTI FASCILE? SANCTA PELAGIE? ET MARIE VIR HEC TEMPLO QUOD EDIFICAVID ADEFONSUS PROLIS FROILANI PRINCIPIS SUB ERA DCCCCLCXXXVIIII
Esta lápida, como ya dijimos, encontrada en el concejo de Carreño en la Iglesia parroquial de Santa Eulalia del Valle perteneció a otra iglesia desaparecida ubicada en el Monte Areo lo confirma la frase inicial de la piedra y el paraje de San Pablo que subsiste en el Monte Areo inseparable en la liturgia de San Pedro.Su traducción es la siguiente:POR EL HONOR DE SAN PEDRO Y PABLO, APOSTOLES. HAY GUARDADAS EN EL ALTAR LAS RELIQUIAS DE SAN TIRSO, DE SANTA AGUEDA, DE SANTA PELAYA Y MARINA VIRGEN, EN ESTE TEMPLO QUE EDIFICO ALFONSO, HIJO DEL PRINCIPE FROILAN BAJO LA ERA DCCCCLCXXXVIIII A. DIA TERCERO; la escritura es de tipo visigodo.
A la muerte de Garcia I, rey de León, el rey de Galicia Ordoño II le sustituye en el trono imperial leonés y a la muerte de Ordoño II el rey asturiano Fruela II se hace con el trono de León por brevísimo tiempo.Fruela II que había reinado en Asturias con la oposición de la nobleza leonesa ocupa por poco tiempo el trono de León pues muere en 925; Ordoño II había muerto en 924.
Fruela II casó en primeras nupcias con Nunilo Jimena y tuvo tres hijos Alfonso, Ordoño y Ramiro.De la segunda mujer Urraca no tuvo descendencia. A la muerte de Fruela II los magnates galaico-portugueses apoyaron a los hijos de Ordoño II Sancho,Alfonso y Ramiro mientras que la nobleza astur apoyó a Alfonso Froilaz estallando una guerra civil.Sampiro refiriéndose a Alfonso Froilaz dice "sceptra paterna regere videbatur" es decir parecía que representaba legítimamente los derechos paternos.Alfonso Froilaz vencido huyó a Asturias donde en 931 fue hecho prisionero junto a sus hermanos; Ramiro II que se había hecho con el trono ordenó cegarles y encerrarles en distintos monasterios. En el cartulario de Santa María del Puerto hay una escritura del 26-3-927 donde se halla la expresión regnante rex Alfonso Froilaci asi pues conservó el título de rey de Asturias.Alfonso Froilaz y sus hermanos fueron acogidos en Asturias por su madrastra Doña Urraca y su tio Ramiro hijo de Alfonso III. Asi pues el rey jorobado y ya ciego erigió la famosa lápida del Monte Areo y es indudablemente el último rey de Asturias.
Sin lugar a dudas la historia de Fruela II y Alfonso Froilániz daría materia para un buen guión cinematográfico siendo uno de los episodios mas apasionantes de la historia asturiana.




VISTA PANORÁMICA DEL MONTE AREO
La madre de Alfonso Froilániz fue la reina Nunilo, primera esposa de Fruela II y cuyo nombre aparece en la caja de ágatas ovetense del año 910. "Nunilo regina confirmans manu mea".
La madrastra de Alfonso Froilániz fue la reina Urraca, del clan de los Banu Qasi de Tudela.
Fruela II falleció probablemente de lepra, siendo enterrado en León y trasladados sus restos a Asturias, concretamente a la Iglesia de Santa María de Oviedo para evitar que fueran profanados por las tropas de Almanzor que en su avance llegó a destruir León.






Alfonso Froilániz representa en su triste historia la desaparición de Asturias como reino y como vanguardia de los diferente entes políticos que se estaban forjando en la lucha contra el Islam para pasar a ser una tierra emprobrecida y remota de la cual solo se acordarían los reyes de Castilla y de León en los momentos mas difíciles como refugio ante las campañas de Ibn al Mansur o por los problemas causados por su carácter levantisco y adjetivados en la célebre frase de las crónicas castellanas como "gente bulliciosa".
Algunos personajes intentaron cambiar el curso de la historia pero eso será tema para próximos capítulos

martes, 14 de julio de 2009

EL LIMES DE LA MESETA NORTE, POLÉMICA CON BESGA MARROQUIN

Este artículo fue vetado en TERRANTIQVAE por la larga mano de la Inquisición.Constaba de 40 comentarios donde el señor Besga Marroquín y un servidor debatimos acerca del limes y de los orígenes del Reino de Asturias (Indigenismo-Goticismo).El artículo fue vetado por el señor Santos a instancias probablemente de la Gran Papisa de la Inquisición Dra Alicia Canto de Gregorio, refugiada en TERRANTIQVAE-RÁVENNA tras la caida de CELTIBERIA-ROMA.El señor Besga Marroquín que en todo momento se comportó como un caballero a pesar de debatir con contundencia por ambas partes ha sido ajeno por completo al veto del artículo.Desgraciadamente y pensando que tras treinta y pico años de democracia la censura habia tocado a su fin no tuve la precaución de hacerme con una copia del artículo y de los comentarios (40).Sin embargo he recuperado en caché parcialmente los comentarios unos ( junto al artículo que originó el debate.He de señalarles queridos lectores que figuro con el pseudónimo de Aureliano por estar vetado mi apodo Neville por el dueño del portal, el señor Santos fiel mayordomo de la Señora Doña Alicia Canto de Gregorio.EL LIMES DE LA MESETA NORTEEn la Notitia Dignitatum Occidentalis (10.I XII,26-32) se mencionan a una serie de unidades militares que se asentaban a lo largo del norte de Hispania en una disposición aparéntemente defensiva frente al territorio que abarcaba desde Galicia hasta Vascongadas. Dichas unidades militares estaban al mando de un magister militum praesentalis a parte peditum:praefectus legionis septimae geminae, Legione; tribunus cohortis secundae Flaviae Pacatianae,Paetaonio;tribunus cohortis secundae Gallicae, ad cohortem Gallicam; tribunus cohortis lucensis, Luco; tribunus cohortis Celtiberae, Brigantiae, nunc Iuliobriga; en la Tarraconense tribunus cohortis primae Gallicae, Veleia.Están identificados los lugares de León, Rosillo de Vidiales, Lugo, Julióbriga, Retortillo y Veleia como lugares de acantonamiento de estas tropas limitanei.Este testimonio nos habla de la existencia en el norte peninsular de un limes enigmático ya que está súmamente alejado del frente del Rhin y del Danubio donde ejercían presión los pueblos bárbaros; tampoco estaba orientado a impedir una penetración por los Pirineos de alguna infiltración bárbara como la ocurrida de los Cimbrios y Teutones en la época republicana o la de los Francos y Alammanes del siglo III.También es constatable como Dídimo y Veriniano intentaron precísamente en los Pirineos detener a los Suevos, Vándalos y Alanos que saquearían Hispania en el momento de la agonía del Imperio.Se han argumentado todo tipo de hipótesis relativas al famoso limes que algunos incluso niegan.Para algunos estudiosos dicho dispositivo militar guardaría relación con las abundantes y ricas villae agrícolas del Ebro occidental y del Duero; Palol, Caballero, García Bellido o Blázquez nos hablan de lo encontrado en las necrópolis excavadas que ofrecen ajuares muy uniformes y semejantes a los de las tropas que vigilaban la frontera germana; las armas y utensilios encontrados en las necrópolis pertenecían a tropas limitanei formadas por jefes y soldados germánicos y no de tropas locales de los latifundistas con lo cual no compagina muy bien con un supuesto ejército privado latifundista para proteger dichas villae arriba mencionadas.Una configuración defensiva tan compleja del limes estructurado en profundidad y sostenido por elementos tan dispares como las tropas normales de las cohortes de la Legio VII gémina por un lado y los limitanei y comitatenses por otro sugiere a Montenegro y otros autores que dicho limes tenía como objetivo la defensa contra un enemigo exterior y la represión del bandidaje y tensiones sociales interiores.Y en este sentido las crónicas romanas previas a la invasión bárbara del siglo V nos hablan de una situación muy convulsa en el norte de Hispania por la exagerada presión fiscal y los atropellos de las tropas germanas foederati en los conflictos de los usurpadores por el poder Imperial.Hay una mención expresa en una constitución imperial 9-XII-400 dirigida al pretorio de las Galias con el fin de impedir los abusos de todo orden cometidos por el vicario de las Españas y sus agentes referente a la recaudación de la annnona.Asi pues no solo como antes dijimos los mercenarios germanos federados venidos con el usurpador Constante devastaban dicha zona sino también las propias tropas imperiales allí estacionadas.La Dra Carmen Fdez Ochoa aporta otro punto de vista cual es que dicho limes tenía la función de apoyar y abastecer el frente del Rhin -en teoría vía marítima- a través de los puertos del Cantábrico.Sin embargo dicha teoría no es muy sostenible -Blázquez la desecha complétamente- dado el altísimo costo que ello conllevaría y la lejanía del teatro de operaciones no habiéndose tampoco encontrado una importante cantidad y variedad de productos hispanos en la zona renana.Otra opción es la de Vigil y Barbero y otros autores que suponen que el limes estaba destinado a controlar y mantener en su sitio a las poblaciones del norte de Hispania que con el debilitamiento del poder romano disfrutarían de una libertad de facto y que por la pobreza del terreno volverían a sus tácticas depredatorias precísamente contra las ricas villae antes mencionadas de la meseta.Por último una explicación que bebe de varias teorías para explicar tan debatido limes argumenta una teoría ecléctica según la cual el dispositivo militar atendería a la defensa de los centros mineros del noroest , al control de las gentes del norte peninsular vasco-cántabro-astur y a la protección de los ricos latifundios de la región preferéntemente de la cuenca del Duero.Sin embargo esta teoría ecléctica no es menos problemática sino todo lo contrario ya que los centros mineros del noroeste hacía mucho tiempo que estaban abandonados y las poblaciones del norte viviendo a la manera romana desde hacía siglos.El limes sigue siendo un enigma sin una explicación sólida y convincente.Fuentes: Sayas Abengoechea, Gª Moreno, Blázquez, Carmen Fdez Ochoa,Montenegro, Vigil y Barbero, Sánchez Albornoz,Santos Yanguas,Palol, Caballero, García Bellido. AQUÍ TIENEN EL ENLACE QUE PUDE SALVAR EN CACHÉ http://127.0.0.1:4664/cache?event_id=90128&schema_id=2&q=limes+meseta+norte&s=ceEBHaI61YNL6KmmrjKugGOs5pY
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RESPONDE GIANNINI
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 20:55
Comentario por Giannini el enero 10, 2009 a las 11:32pm Borrar comentario Estimado Aureiliano, insisto, la ND no es un documento que se haya conservado original, ni las copias están revestidas de aquellos elementos que hablan de autenticidad. Luego, será quien use ese documento el que tendrá que probar su autenticidad, en el ínterin, una copia simple no es un documento que pueda dar fe de algo. Es más, por lo que leo, la realidad que refleja incluye elementos tan extraños como señalar que tribuno de la CIC se traslada desde Brigantia a Iuliobriga en un tiempo en el que Iuliobriga ya no existe, y en una Iuliobriga de la que no se han exhumado materiales que se relacionen con la CIC. Decir que el documento en cuestión es aséptico, sólo puede nacer si me lo permite -con toda modestia- de una convicción apriorística ¿o es que el propio documento indica cuándo, quién o para qué se redactó?Si me permite el símil, si Vd. va a una entidad bancaria con un documento tan aséptico y burocrático como es la fotocopia de su DNI o de su cartilla de ahorros, es de suponer que si no lo conocen, no podrá hacer un solo movimiento en su cuenta. Tendrá que demostrar a través de otros medios, documentales o de otro tipo, revestidos de alguna garantía, que Vd. es quien dice que es la fotocopia de ese DNI. Mientras tanto, los empleados considerarán que entra dentro de lo posible que haya pegado su foto a un DNI de otra persona, le haya hecho a continuación una fotocopia, y esté dando gato por liebre.
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RESPONDE ARMANDO BESGA MARROQUIN
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:09
Comentario por Armando Besga el enero 10, 2009 a las 11:54pm Borrar comentario Aureliano:La teoría del limes hispano, que fue sólo una interpretación y no el producto de una monografía de investigación (las dos de Blázquez son tardías y han sido fácilmente refutadas), es, a mi juicio, un baldón de la historiografía española. Porque no habiendo un limes, se habló confusamente de dos (nadie intentó explicar las relaciones entre ambos):1. El de las guarniciones de la N.D. refutado ya en 1980 por J. Arce "La Notitia Dignitatum et l'Armée romaine dans la Diocesis Hispaniarum", Chiron, 10, 1980, págs. 593 y ss (puede ver una versión más asequible en El último siglo de la España romana: 284 409, Alianza ed., 1982, págs. 63 y ss.) Otra cosa son las distintas explicaciones que ha dado Arce para justificar esas guarniciones y que le han llevado a cuestionar la veracidad de la ND y considerar que la mención de esas tropas es un “desideratum”. Pero hay otras explicaciones más razonables que podrá encontrar en la bibliografía reciente. Al fin y al cabo se trata de tropas que siempre habían estado en Hispania y que seguían teniendo su cuartel principal en León.2) El otro limes es el de las llamadas necrópolis del Duero, la mayoría de las cuales ¡estaban al sur del Duero! en una distribución más incoherente con respecto al objetivo de una frontera fortificada contra los pueblos del norte que el de la N.D. Y cuyo argumento estrella era el cuchillo tipo Simancas, un pequeño cuchillo de caza que no tiene nada que ver con un puñal militar, que, por razones obvias, debe tener doble filo. Este limes quedó completamente refutado en un libro (que me parece que es una tesis doctoral; el limes hispanus es ajeno a trabajos de envergadura): Angel Fuentes Domínguez, La necrópolis tardorromana de Albalate de las Nogueras (Cuenca) y el problema de las denominadas "necrópolis del Duero", sobre todo págs. 101 117, 169 195 y 233-238. (autor, por cierto, de un artículo contundente: Los castella del limes hispanus bajoimperial; y es que Blázquez había llegado a considerar que esos castella eran la principal prueba del limes).De la calidad de las obras citadas habla el hecho de que (como señalé en un mensaje anterior y ahora puedo certificar) el propio Blázquez ha abandonado la teoría: "Nosotros somos de la opinión de que no se debe deducir de los datos de la Notitia Dignitatum Occidentis ni la existencia de los limitanei, ni del limes, sino sólo la presencia de tropas fijas o móviles en Hispania" ((El limes de Hispania en los siglos IV y V, pág. 631).No existiendo un limes romano, se propugnó la existencia de un limes visigodo, con pruebas de peor calidad. De su refutación me encargué en mi tesina de licenciatura: “Consideraciones sobre la situación de los pueblos del norte de España en la época visigoda del Reino de Toledo, Universidad de Deusto, 1983, pp. 116-126 principalmente. No tengo constancia de que ni siquiera se haya intentado criticar los argumentos que utilicé. Pero es lo que ha sucedido en esta historia, que unos argumentan y otros interpretan (tampoco he visto criticados los argumentos de Arce y Fuentes Domínguez; otra cosa, repito, son las teorías del primero sobre las tropas de la ND, que sí que han sido criticadas, pero que ahora no hace al caso).Y al limes visigodo, le sucedió un limes musulmán (peor argumentado todavía), e incluso otro astur-leonés. Esto último fue propuesto en un artículo de once páginas por L. Olmo Enciso (Problemática de las fortificaciones altomedievales (siglos VI VIII a raíz de los últimos hallazgos arqueológico). Y todo ello porque hay restos de fortificaciones en un territorio que tiene el nombre de Castilla. En este estudio --después de analizar los testimonios arqueológicos de Puig Rom (Rosas, Gerona), Recópolis, Begastri (Ceheguín, Murcia) y Montefrío (Granada), es decir, lugares todos alejados centenares de kilómetros del supuesto limes visigodo del Norte de España-- se concluía lo siguiente: "Es interesante comprobar cómo la influencia bizantina y los rasgos estructurales de estas fortificaciones van a seguir presentes en la península Ibérica después del 711. Así, los datos que ofrecen los primeros estudios sobre la organización militar de los primitivos reinos cristianos apuntan a una pervivencia de los sistemas defensivos presentes en época visigoda. Si tomamos como ejemplo el reino de Asturias veremos como para la época de Alfonso III existe una organización con un "limes' basado en una serie de asentamientos que controlan zonas estratégicas del territorio. Asentamientos que algunos de ellos formaban parte de los anteriores dispositivos tardorromanos, y, que por tanto, proporcionan una prueba más acerca de una organización defensiva que ve su comienzo en el Bajo Imperio y perdura hasta época altomedieval" (pág. 21).Podría aumentar la bibliografía contraría al limes. Pero creo que esto suficiente para que tenga una idea correcta del asunto.
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RESPONDE NEVILLE-AURELIANO
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:10
Comentario por AURELIANO el enero 11, 2009 a las 12:02am Borrar comentario ¿Y no es mucha coincidencia señor Giannini que esos acantonamientos militares de los que habla la N D se vean corroborados por excavaciones en las que han aparecido hebillas y armas cortas -cuchillos tipos Simancas- similares a los utilizados en la frontera del Rhin?¿no le parece a Vd que son demasiadas coincidencias?¿Y que me dice Vd del mantenimiento de dichos acuertelamientos durante la época visigoda?¿ no es cierto que la línea de obispados del norte:Lugo, Astorga, León, Palencia,Oca guarda un claro paralelismo con la ubicación de las tropas mencionadas?¿no es cierto que las ciudades conquistadas en la primera ofensiva cristiana por Alfonso I el Católico también coinciden con dichos emplazamientos militares?¿no es cierto que el itinerario conquistador de Muza en el 714 sospechósamente también coincide con el de los emplazamientos mencionados?¿no cree Vd que la expedición de Muza tenía por objeto desbaratar el "limes" visigodo heredado de los romanos? Comentario por AURELIANO el enero 11, 2009 a las 12:11am Borrar comentario Lamentáblemente mientras respondía a Giannini se me ha colado la intervención del señor Armando Besga de tal manera que no he podido leerla antes de añadir el comentario.Sin saberlo me ha respondido a algunos de los requerimientos que le efectúo al señor Giannini hoy ya es muy tarde los leeré con atención.Buenas noches y gracias por su atención
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RESPONDE ARMANDO BESGA MARROQUIN
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:11
Comentario por Armando Besga el enero 11, 2009 a las 12:16am Borrar comentario Auteliano:Veo ahora un mensaje suyo anterior. Y le contesto:1) La hipótesis de que eran tropas para defender las costas de invasiones la dio el propio Arce. Fue su primera explicación alternativa y fue criticada por A.J. Domínguez Monedero, Los ejércitos regulares tardorromanos en la Península Ibérica y el problema del pretendido "limes hispanus.2) Lo del astur primitivo e indómito y lo del cántabro primitivo e indómito son tópicos. Le aseguro que no encontrará ni un testimonio que certifique su peligrosidad en el Bajo Imperio.Le he dado la referencia del 409 sobre los vascones. Le doy otra ahora sobre los astures en el 404. Son unos versos de Claudio Claudiano: Cuando nació Serena [...] se sonrió Galicia, el Duero famoso por sus flores y rosadas riberas cambió por doquiera en púrpura el vellón de sus ovejas, el mar cantábrico vertió piedras preciosas en las playas de su costa, el pálido astur no buceó errante por las minas de sus montes, sino que sus venas hicieron brotar el oro espontáneamente ofreciéndole a su sagrado natalicio. Sume a ello la docena de Villas tardorromana asturianas: Asturias presenta, junto con Pontevedra, el mayor porcentaje de yacimientos tipo villa del norte peninsular, situándose cuantitativamente hablando muy cerca de numerosas provincias de supuesta mayor romanización (L.R. Menéndez Bueyes, Reflexiones críticas sobre el reino de Asturias, p.192, n. 99). Y ninguna de ellas muestra huellas de haber sido atacada (¿iban a ir los astures indómitos que quedaran a atacar las de Palencia?). Ya le he dicho estamos ante un asunto en el que unos argumentan y otros interpretan. Al respecto, le recuerdo lo que han escrito C. Fernández Ochoa y A. Morillo Cerdán, máximos conocedores de la Asturias romana, en 2007: Esta postura [la reivindicación de la romanización de los territorios septentrionales], que se observa en la bibliografía científica de las dos últimas décadas, arranca de la incuestionable evidencia de los datos proporcionados por la arqueología, daros que siguen siendo ignorados, cuando no manipulados por algunos investigadores procedentes de la historia antigua (Astures y romanos, p. 16).
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RESPONDE GIANNINI
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:12
Comentario por Giannini el enero 11, 2009 a las 12:18am Borrar comentario Pues Sr. Aureliano, como soy un modesto lector que en lo que ahora plantea lamentablemente no cuento con criterio, le respondo a la gallega: ¿no le parece a Vd. extraño que en Iuliobriga no aparezcan restos de la CIC, o que en el S. III-IV ya no exista Iuliobriga, pese a que la ND se suele datar en los S. (III-)IV y que señale claramente que el tribuno de la CIC se desplaza desde Brigantia, ciudad que hoy conocemos por Coruña, en donde no se encuentran -que yo sepa- materiales que revelen su presencia, que sí se encuentra en el campamento de Ciadella -a unos 70 km- en donde la toponimia no nos conservó en documentación medieval, no digamos ya actual, nada parecido a Brigantia, nombre este último que sí aparece en documentación antigua o medieval relacionada con La Coruña o sus inmediaciones? Porque esto no encaja, y si parte de la información que nos ofrece el documento no encaja, es porque algo falla, sea en su contenido, sea en su interpretación. Luego no me parece descabellado plantear que se tome con una cierta prudencia la ND -como creo que hacen otros investigadores especializados en el tema según se ha dicho por aquí sin tomarla como dogma de fe.
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RESPONDE ARMANDO BESGA MARROQUIN
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:13
Comentario por Armando Besga el enero 11, 2009 a las 12:41am Borrar comentario Aureliano:Las preguntas que se hace en un mensaje anterior y que acabo de ver están contestadas en la bibliografía que he referido y que veo que desconoce.Me limitaré al limes romano (los otros son de una endeblez increíble y se caen si no existe el romano.Como ya le he señalado el limes romano es un conjunto de interpretaciones. Las dos únicas monografías fueron de Blázquez. Y al respecto Arce pudo concluir lo siguiente: “Acumulación no es demostración. Cuando los arqueólogos hayan estudiado, medido y analizado los edificios mencionados por Blázquez para apoyar la (indemostrada) teoría del limes; cuando hayan analizado la relación geográfica y estratégica de los mismos y sus funciones de acuerdo con el sistema viario, urbano y de villae; cuando se haya estudiado en España a fondo el significado y función de los términos turres, castella, burgi, phrouria, y se hayan aquilatado críticamente las noticias de las fuentes, podremos entonces comenzar a utilizar esta información en un contexto histórico. Mientras tanto el limes contra cántabros, astures y vascones es no sólo un error, sino una simple invención sin fundamento, demasiadas veces repetida lamentablemente en los foros internacionales” (El último siglo..., pág. 168). Y ya le he dicho que le propio Blázquez ha abandonado la teoría.Y es que las pruebas arqueológicas aducidas son de desigual valor, pues ha bastado cualquier cuchillo o trozo de muro para defender, sin más, la existencia de un limes. Pero otras aparentemente han tenido más consistencia hasta el punto de que autores como J. Arce y A.J. Domínguez Monedero, que no creen en la existencia del limes hispanus, las han considerado testimonio de la presencia de tropas, que para el primero serían soldados privados y probablemente los famosos honoriaci del usurpador Constantino III (El último siglo..., pág. 80), y para el segundo, los soldados comitatenses citados por la Notitia Dignitatum (Los ejércitos tardorromanos..., págs. 122-123). Vamos a centrarnos en estas armas, pues las murallas de ciudades como Astorga no pueden probar nada ya que se encuentran por todo el Imperio y los castella, como ha probado A. Fuentes (Los castella del limes hispanus bajoimperial), tampoco. Al respecto, recientemente José Avelino Gutiérres González ha podido afirmar lo siguiente: “los supuestos castella y turres romanos del norte del Duero: Castronuevo de Valderaduey, San Pedro de Latrace, Toro, Urueña, Tordehumos y Valencia de Don Juan (F. Wattemberg, 1959; 1961-1962; J.M. Blázquez, 1980) no sólo no se sitúan en la "avanzadilla de frontera" (J. Arce, 1982, pp. 165 y ss.), sino que en realidad ni siquiera son fortificaciones tardorromanas, sino plenomedievales: son murallas y castillos erigidos en las pueblas de frontera por Fernando II y Alfonso IX en el reino leonés ante Castilla (Castronuevo, San Pedro de Latarce, Belver de los Montes, Villalpando y Toro) entre 1180 y 1216 y por Alfonso VIII en la frontera ante León (Tordehumos y Urueña), mientras que los restos de Valencia de Don Juan atribuidos al momento romano son en realidad --como hemos comprobado en nuestras excavaciones arqueológicas-- parte del castillo bajomedieval” (Fortificaciones y Feudalismo en el origen y formación del Reino leonés, pág. 90).La prueba fundamental se encuentra en las supuestas armas que se han encontrado en las denominadas necrópolis del Duero y que se han vinculado a las del limes renano. En primer lugar, hay que señalar, como han reconocido partidarios de la tesis del limes --J.M. Blázquez (El limes..., pág. 623), J.J. Sayas (Consideraciones..., pág. 488)--, que estas armas son escasas, en contraste de lo que ocurre en las necrópolis militares del Rin. Otra diferencia sustancial, como ha demostrado exhaustivamente A. Fuentes, es que esas pretendidas armas suelen aparecer ordinariamente aisladas, cuando en el limes renano no sólo aparecen en conjuntos, sino también muchas veces repetidas en la misma tumba (cosa que en España no sucede). Aunque se ha hablado de una panoplia propia del soldado de la necrópolis del Duero, compuesta de puñal, lanza y hacha, lo cierto es que eso sólo se ha encontrado reunido en tres tumbas (menos del 1% de las excavadas), dos de las cuales presentan elementos discutibles. Finalmente, y es lo más importante, no hay nada que testimonie que esos objetos sean verdaderas armas. En primer lugar, hay que señalar que no hay ni un sólo ejemplar de algo que sea inequívocamente militar como los cascos, las espadas y arcos de doble cuerna. En segundo lugar, que las pretendidas armas encontradas en España, cuchillos, puntas (de lanza o flecha) y hachas (muy escasas) parecen tener otros fines que los militares. Esto parece bastante claro en el cuchillo tipo Simancas, que es el arma más famosa de las necrópolis del Duero de la que se han encontrado 26 ejemplares, pues es muy pequeño para ser un arma militar y sólo tiene un filo lo que le diferencia de un puñal, que es el arma propia de un soldado, como ya viera P. de Palol; por sus características, es más bien un útil de caza diseñado para cortar y, de hecho, la decoración de dos de sus vainas es de tema venatorio (hipótesis apuntada por García Merino y confirmada por A. Fuentes); de hecho, se ha encontrado también en Castellón y en el sur de Italia hay piezas parecidas (F. Pérez Rodríguez y J.A. Abásolo, Acerca de Saldania romana, pág. 566), es decir, fuera de cualquier ambiente militar. Las hachas (sólo siete), habitualmente asociadas a utillaje profesional, son por sus características más propias de un carpintero o de un trabajador rural que de un soldado, como ya señaló Caballero Zoreda (salvo quizás la encontrada en Taniñe). Finalmente, las puntas, encontradas en treinta y un tumbas, y que en muchas ocasiones no se pueden discernir como propias de flechas o de lanzas, podrían ser también armas de caza; de hecho, en la mitad de las ocasiones han aparecido solas o en compañía de un utillaje profesional impropio de un soldado. Y todo esto, no es fruto de meras observaciones, sino el resultado de un completo análisis realizado sobre todos los datos por A. Fuentes (La necrópolis de Albalate... págs. 187-195, 233-238 y 257).Otro elemento a considerar es el de la cronología, que normalmente ha tenido un tratamiento confuso. A. Fuentes ha creído encontrar suficientes elementos como para considerar que estas necrópolis son en buena parte del siglo V. Pues bien, si buena parte de las pretendidas armas de las necrópolis fueran del siglo V, no podrían testimoniar la existencia de ningún limes, porque el Imperio no estaba entonces capacitado para sostenerlo y porque el peligro potencial de los pueblos del Norte no era nada comparado con la presencia de los bárbaros en la Península.Finalmente, hay que llamar la atención sobre la incoherencia que supone creer encontrar pruebas arqueológicas de la existencia de un limes en el valle del Duero y más al sur y no haber encontrado rastro de las fortificaciones propias de un limes ni, lo que es más significativo, de la presencia de soldados en las excavaciones de Iuliobriga (J.M. Solana, Los cántabros y la ciudad de Iuliobriga; A. Cepas, Crisis..., pág. 177) e Iruña (G. Nieto, El oppidum de Iruña), donde según la Notitia Dignitatum se habían establecido tropas, aunque posteriormente se ha considerado que l un broche de cinturón hallado en las excavaciones podría corresponder a un guerrero (posiblemente bretón) equipado en Britania durante la primera mitad del siglo V (J. Aurrecoechea Nuevas aportaciones al conocimiento de los contingentes militares tardorromanos en Hispania; pero el autor, que considera que este cingulum podría servir para certificar que Veleia se encontraba en Iruña, admite que este hallazgo podría ser de un soldado vuelto a la patria alavesa tras su licenciamiento (pág. 269) o de un miembro de las tropas provenientes de Inglaterra de Constantino III (pág. 270)).Tampoco se han encontrado restos del siglo IV en los otros lugares donde había una cohorte y se ha excavado, como en Paetonio, donde los hallazgos no van más allá del siglo III (J. Arce, Notitia Dignitatum Occ. XLII y el ejército de la Hispania tardorromana, n. 19; S. Carretero y M.V. Vaquero, Los Campamentos Romanos de Petavonium, págs. 44-45, sobre todo). Y a todo ello hay que sumar que cuando se produce la usurpación de Constantino III (408) y la invasión del 409 las tropas de la ND no aparecen por ninguna parte.
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RESPONDE NEVILLE-AURELIANO
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:14
Comentario por AURELIANO el enero 11, 2009 a las 12:53am Borrar comentario Ciértamente estoy muy cansado pero creo que Morfeo debe esperar.No desconozco que vd Don Armando es un "peso pesado" dentro de su campo aunque si me permite mi audacia sus líneas de investigación hoy en dia están superadas lo cual no quita mérito a sus muchas y valiosas aportaciones.Voy a responderle a algunas afirmaciones suyas que no considero válidas y para empezar ya que le gusta tanto la poesía yo le respondo con este verso del poeta HoracioCantabrum indoctum iuga ferre nostra Comentario por AURELIANO el enero 11, 2009 a las 1:20am Borrar comentario "Lo del astur primitivo e indómito y lo del cántabro primitivo e indómito son tópicos. Le aseguro que no encontrará ni un testimonio que certifique su peligrosidad en el Bajo Imperio".Cito a J Mª Blázquez en su libro Astures y Cántabros bajo la administración romana"Los cántabros y los astures fueron los últimos pueblos hispanos sometidos por Roma .La guerra de conquista terminó en el año 19. a.C. y fue llevada con gran ferocidad por ambaspartes".Aunque muchos autores ponían en solfa lo cruenta de dicha contienda al igual que se pone en entredicho a la N.D. los recientes descubrimientos de Peralta Labrador en Cantabria y de Jorge Camino en Asturias lo corroboran.Recordemos que muchos estudiosos del tema afirmaban categóricamente que solo habían existido combates en la zona controlada por estos pueblos en la Meseta Norte es decir en las actuales provincias de León y Burgos-Palencia.De la misma manera y con argumentos febles -en el caso de la guerra se mencionaba una operación propagandística romana para ensalzar a Augusto- se utiliza ahora el de que la N. D. está desfasada o carece de validez.Me gustaría Don Armando que vd nos explicara porqué doscientos años después de la conquista romana se mencionaba a los Astures que participaron en la guerra de Dacia como symmachiarii y porqué los symmachiarii se reclutaban entre poblaciones no romanizadas.La mención a los symmachiarii astures en una lápida de Ujo es tan cierta como la N.D. y vds no pueden pasarla por alto.Y vaya por delante que YO NO NIEGO la romanización de Asturias y Cantabria pero sí que haya sido igual a lo largo de toda su geografía y capas sociales.¿puede Vd explicarnos porqué los Visigodos en el año 680 todavía en tiempos de Wamba y solo treinta años antes de la invasión musulmana aún mandaban campañas de castigo contra los Cántabros y Astures? ¿porqué el rey visigodo Don Rodrigo en el mismo año de la invasión musulmana estaba combatiendo contra los Vascones?¿porqué los Visigodos ocuparon la Península sin resistencia salvo la zona de la franja cantábrica?¿no será que esos pueblos tenían algún tipo de potencial militar en tanto en cuanto el resto dependía para su defensa exclusivamente del decrépito ejército imperial?
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RESPONDE ARMANDO BESGA MARROQUIN
Admin el Vie 26 Jun 2009 - 21:15
Comentario por Armando Besga el enero 11, 2009 a las 1:44am Borrar comentario Aureliano:Horacio es del siglo I y la conquista romana de Asturias es el del siglo I a.C. Y realmente la guerra contra los astures no fue para tanto:"La actitud de las élites dirigentes de estos grupos [de astures] fluctuará [en el momento de la conquista] entre el enfrentamiento y el colaboracionismo [traición de los brigaecinos, Edicto del Bierzo]. Debemos desterrar definitivamente la figura historiográfica de la resistencia a ultranza de unos indígenas “libres y heroicos” frente a una potencia colonial “arrolladora” y valorar en su justa medida la dialéctica del proceso de conquista. En este proceso, los romanos actuaron muchas veces por vía interpuesta, captando a los jefes locales mediante pactos para extender su autoridad entre el resto de la población, pero siendo tolerantes con los sistemas de organización social y con las creencias religiosas. Las respuestas generadas por el contacto entre romanos e indígenas fueron muy diversas."Por otra parte, en zonas astures involucradas dentro de la guerra contra Roma, se ha constatado perfectamente, desde el punto de vista arqueológico, que el impacto de la conquista no se traduce en signos de violencia generalizada en los asentamientos. Por lo tanto, es lícito pensar en una ocupación en su mayor parte pacífica, que se traduce más en un control territorial que en una acción violenta y aniquiladora destinada a someter por la fuerza a unos pueblos libres e imponer de raíz nuevas normas y formas de vida romanos" (Carmen Fernández-Ochoa y Ängel Morillo Cerdán, Astures y romanos, pp. 18-19 y 20; estudio de 2007 ¿También éste está superado?).Y después nos queda la romanización:Curiosamente, este cliché [de Estrabón] ha sido aceptado por los historiadores no sólo para la época que escribe Estrabón, sino como un rasgo propio de estas gentes “bárbaras”, que se proyecta como una constante histórica a través de los siglos como una constante histórica ¡hasta los inicios de la Reconquista! Acontecimientos sucedidos en los siglos IV y V d.C. siguen contemplándose en clave de la resistencia propia del carácter indómito y antisocial de los pueblos del norte, como si el tiempo transcurrido desde la conquista no hubiera afectado para nada a la sociedad septentrional en su conjunto, que casi por una” maldición” se ve obligada a demostrar periódicamente su resistencia al poder constituído (ibidem, y al respecto le podría dar múltiples referencias).2) La noticia de que Wamba luchó contra los astures es 200 años posterior y estña contradicha por la contemporánea Historia Wambae regis de San Julián. En las fuentes de la época sólo consta una REBELION de los astures (reinado de Sisebuto), como sucedió en tantos otros territorios visigodos).3) Los vascones son otro asunto, pues su independencia en época visigoda está acreditada por más de siete guerras contra los visigodos.4) Me extraña que deconociendo la bibliografía de las últimas décadas me diga que mis estudios están superados. Es la segunda vez que se me dice desde que el mes pasado comencé a escribir en Terrae Antiquae. Y las dos veces ha sido desde León. Debe ser, por tanto, bibliografía leonesa que desconozco y que tampoco ha debido tener mayor trascedencia.5) El argumento ad hominem no sirve en este caso (nunca sirve) porque salvo lo referente al fantasmogórico limes visigodo no he hecho sino utilizar los argumentos empleados por otros, que tampoco me consta que hayan sido superados.6) Y el que a partir de ahora calle no significa que otorgue. Es que en primer lugar no tengo tiempo (y en vez de trabajar en lo mío, y le aseguro que me espera una semana muy dura, el que he empleado ahora está claro que no ha servido para nada). Y en segundo lugar, porque primero tendría que hacer usted algunos deberes como leer la obras que le recomendé con mi mejor intención.Atentamente.
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RECONQUISTA, EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES


Fernández Conde: «La Monarquía asturiana perfecta y bien entramada es un mito»Publicado el 23/02/2008.Fuente: La Nueva España El catedrático de Historia Medieval habla sobre la conformación del Reino de Asturias y sus posibles interpretaciones«La evolución de la Monarquía asturiana es más compleja de lo que suele apuntarse, y para entenderla se tienen que ver las fuerzas locales que estaban detrás. Si partimos de la base de una sociedad asturiana muy fragmentada que tiene jefes con bastante poder, se puede entender con bastante coherencia la evolución política de la Monarquía», afirma Javier Fernández Conde. En su opinión, la «Monarquía asturiana perfecta, bien entramada como ahora se entiende, es un mito». El catedrático de Historia Medieval habló sobre «La Monarquía asturiana: problemas pendientes y posibles perspectivas de interpretación» en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA, dentro del ciclo de conferencias sobre celebraciones de 2008.Al inicio de la charla, Fernández Conde dejó constancia de las dificultades para acceder al estudio de la Monarquía asturiana, como la escasez de fuentes, las interpolaciones y falsificaciones en los documentos y el carácter de las crónicas asturianas, que, a su juicio, «son una pieza básica para entender la historia de la Monarquía, pero a nadie se le oculta que estas crónicas están profundamente ideologizadas y escritas en un contexto bien distinto de aquél en el que ocurrieron los hechos».«Asturias tiene territorios muy bien definidos», dijo el historiador. «Creo que una sociedad segmentada como es la asturiana, dividida y enmarcada en estos territorios, tuvo que dar grupos sociales muy circunscritos a éstos y con jefes locales», prosiguió. Este hecho es esencial, aunque no se puede caer en el determinismo geográfico, porque, a su entender, «la geografía no lo determina absolutamente todo, pero sí que condiciona muchísimo». Durante la charla, Fernández Conde dio ejemplos de construcciones antiguas, como monumentos megalíticos o castros prerromanos, para demostrar que la sociedad asturiana no estaba conformada de manera horizontal, sino fragmentada y jerarquizada.Posteriormente, el historiador señaló que de los siglos IV al VI hay personajes vinculados a un territorio, jefes que fueron reconocidos como tales ante la sociedad romana, y señaló ejemplos como la villa de Veranes o el castillo de Gauzón, en el que las excavaciones hechas recientemente «datan una existencia muy anterior a la época de la invasión musulmana», apuntó el experto. Otro centro de poder al que aludió Fernández Conde fue Cangas de Onís, donde «había un pueblo prerromano que escribe sus dedicatorias a los muertos en latín, pero que deja traslucir una cultura antigua no influida por los romanos». Igualmente, Fernández Conde afirmó que en Covadonga hay una serie de elementos muy concretos en los que «aparece con claridad que había un tipo de ambiente precristiano; no resultaría extraño que aquello fuera previamente un santuario pagano».Para el catedrático de Historia, «entra dentro de lo posible» la explicación de que Pelayo fuese un jefe cántabro-astur y que tuviese su centro de poder en la zona próxima a Cangas de Onís. «Sólo así se explica que Pelayo llegue tranquilamente a Covadonga y le elijan como príncipe, no como rey, porque en las crónicas no se dice que fuese designado como tal», subrayó el historiador. En esta misma perspectiva, apuntó que posiblemente el rey Silo hubiese sido un jefe local de mucho poder en Pravia, «un magnate, tal vez, de origen gallego y que quizá se asentó en la capital de los pésicos», apuntó el experto.Las alianzasPara Fernández Conde, la teoría de un poder político que nace de la alianza de jefes locales, primero de una manera modesta, en Cangas de Onís, y luego un poco más fuerte, en Pravia y finalmente en Oviedo, es patente a la muerte de Alfonso II, cuando Ramiro I y Nepociano -su verdadero sucesor, según la crónica albeldense- se enfrentan en el puente del Narcea, posiblemente en Cornellana. «Ahí tenemos dos grupos grandes de poder, gallegos y pésicos, que apoyarían a Ramiro I, y por otro lado, Nepociano, que estaría apoyado por astures, vascones y tal vez cántabros», resumió el historiador.Para finalizar, Fernández Conde expuso que la evolución de la Monarquía asturiana estuvo enmarcada y configurada por las luchas, alianzas y pactos de pueblos muy bien organizados. Por esta razón defiende que «las jefaturas locales creaban poderes locales y que esa Monarquía asturiana maravillosa, perfecta y bien entramada que va sucediéndose de rey a rey, como ahora se entiende, es un mito», concluyó Fernández.Pelayo nunca fue rey, porque la Monarquía asturiana comenzó con Ramiro I. Es la tesis que defendió en Cangas de Onís el historiador y profesor de Historia Medieval Javier Fernández Conde, durante la ponencia «Monarquía asturiana: análisis y nuevas interpretaciones desde una perspectiva social», con motivo del IV Curso «Patrimonio Cangas de Onís: la Cruz». Según Fernández Conde, la Monarquía asturiana tiene su origen en comunidades locales organizadas y jefaturas locales. Para entender cómo empezó la supuesta Monarquía en un lugar tan «extravagante» (por lo de singular) como Cangas de Onís hay que estudiar bien los siglos anteriores al VIII, cuando dominaban las jefaturas locales con independencia de Toledo, de los visigodos y de los musulmanes, y buscar indicios de esas comunidades, señaló el historiador. Claro está que existen vestigios o huellas de centros de poder, como puede ser el dolmen de Santa Cruz, en Cangas de Onís, o el ídolo de Peña Tu, en el concejo de Llanes, señaló Conde. Desde el principio ya había luchas de poder. Pero para llegar a una Monarquía en una Asturias compartimentada tuvo que haber «una gran evolución social», puntualizó el historiador y responsable de seis parroquias del municipio de Candamo. Asturias no era entonces un emplazamiento romano como en el resto de España, ya que el principal interés que tenía para los romanos era la minería, de plata y oro, y la tributación pactada con los jefes locales. Ésa fue precisamente la causante de que se reunieran o formaran en un «concilium» los jefes de las comunidades más próximas: para no tener que seguir pagando los tributos en el siglo VIII a los musulmanes. Según Conde, Pelayo fue un jefe más de la zona, con toda seguridad de la comunidad de Primorias (la comunidad mejor desarrollada de la época), que albergaba la franja que hay entre el río Güeña y el río Sella, hasta la costa. También existen indicios de que Pelayo fue nombrado príncipe por los visigodos tras la escaramuza, pero no que tuviera ningún tipo de aparato cortesano. Luego nunca fue rey. Asimismo, también entra dentro de «lo razonable» que la supuesta batalla o «escaramuza» de Covadonga -que, por supuesto, no fue protagonizada por tantos hombres como cuentan las crónicas- se desarrolló en la zona que hoy ocupa el real sitio, hacia el año 722, tras una reunión de los jefes locales para eludir la tributación a los musulmanes, según comentó Conde. A partir de ahí se intenta perpetuar o conservar un linaje, tras la unión con Gaudiosa, y se va trasladando el poder poco a poco hacia Oviedo. Es ahí, con una corte ya establecida y durante el reinado de Ramiro I, en el siglo IX, donde comienza «la verdadera Monarquía asturiana», según Fernández Conde.Fuente La Nueva España
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Baltar el Jue 26 Feb 2009 - 0:58
Asturorum Regnum divina providentia exoritur", nació por la divina providencia el Reino de los Astures.Las crónicas iniciales solo hablan de los godos como refugiados derrotados
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Baltar el Jue 26 Feb 2009 - 1:27
Pero aún hay mas "super astures procurante Monnuza"- Munuza, designado por los sarracenos para el mando sobre los astures.Las crónicas son claras al respecto:Asturorum Regnum divina providentia exoritursuper astures procurante MonnuzaQui per omnes Astores mandatum dirigens, in unum colecti sunt et sibi Pelagium principem elegeruntEs interesante subrayar que Sánchez-Albornoz, sin prejuicio de considerar a la monarquía asturiana y al propio Reino de Oviedo como continuadores del Reino de Toledo, se decanta por el origen popular de la rebelión: “Pelayo, príncipe de los astures y no rey de los godos (…). Caudillo de una rebelión popular y no rey de una aristocracia dividida y vencida…” Asi pues con la expansión hacia el sur y hacia la zona galaica y vascona y sobre todo con la llegada de mozárabes refugiados, los reyes asturianos necesitaban para legitimar dicho dominio entroncar con la fenecida monarquía toledana.Si como dice Fdez Conde el reino se fue gestando a través de alianzas entre poderes locales la idea de entroncar con los reyes godos sería importantísima para revestir de legitimidad a los primeros caudillos de la reconquista.La campaña de Wamba contra los astures poco antes de la invasión islámica de la que da cuenta la crónica de Alfonso III es otro argumento mas acerca del carácter indiscutible de una rebelión popular y no aristocrática.
Baltar
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Admin el Jue 26 Feb 2009 - 21:41
Saludos, Baltar, como ya dije en tu foro en una ocasión hay otros elementos que hacen inviable la tesis goticista.Los Visigodos tardaron en ejercer el control sobre Hispania; en tiempos de Atanagildo su poder estuvo a punto de desintegrarse.No solamente el reino Suevo persistió hasta la época de Leovigildo sino que sabemos de la resistencia hispanorromana en la Bética y en la inlocalizada Oróspeda.También los bizantinos controlaron una parte de la península.Sabemos de campañas periódicas contra Cántabros, Astures y Vascones. Los monarcas en los últimos tiempos, y cito a Maillo, apenas controlaban el ejército atomizado en clientelas y el estado Visigodo estaba inmerso en un proceso de protofeudalización. En esas circunstancias pretender que una provincia recientemente dominada por los godos, la discutible asturiense; basada en que en un momento dado aparecen firmantes ocho Dux en vez de seis y que quizás se refiera en todo caso a la Asturias Cismontana iba a oponerse al Islam cuando el resto de los magnates godos como Teodomiro pactaron es algo difícil de digerir. Pero aún hay mas y es que si dicho estado centralizado godo y unitario hubiera sobrevivido mediante uno de sus apéndices provinciales; la no probada provincia asturiense; no se entiende tampoco la clara distinción entre astures, galaicos, cántabros y vascones de las que nos hablan las crónicas de la Reconquista; su influencia en la elección de un monarca u otro y finalmente la división del reino en tiempos de Alfonso III entre Galicia, Asturias y León.
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Admin el Lun 2 Mar 2009 - 21:38
Por su interés respecto al tema que estamos tratando publicamos la siguiente noticia que aparece en la revista Arqueología Medieval que a su vez la ha tomado del periódico La Nueva España.http://www.arqueologiamedieval.com/noticias/noticias.asp?id=3480&mensaje_id=1#1 La fortaleza de Raíces, datada ahora dos siglos antes, es clave para entender la historia de AsturiasEl último rey de Asturias, Alfonso III, forjó en Castrillón uno de los símbolos de Asturias, la Cruz de la Victoria. Sucedió en los primeros años del siglo X, en el 908, cien años después de que los ángeles del cielo forjaran la primera de las cruces nacionales de un Estado que se abría hueco a empellones en una Europa a oscuras, con la mirada puesta en las glorias pretéritas de la Roma colapsada. Asturias nació tras los muros del castillo de Gauzón. Según la «Historia Silense» (que es del siglo XI), el último monarca asturiano fue el que ordenó levantar el castillo que ahora las campañas arqueológicas promovidas por el Ayuntamiento de Castrillón están recuperando del pasado. Sobre un peñón al viento, cercado por las olas y las marismas, el castillo de Gauzón vigilaba los mares. Aquel castillo se transformó en el centro administrativo de la comarca, en la capital de lo que por entonces era el alfoz de Gauzón. «Pero esto ha cambiado con los últimos hallazgos: el castillo no es del siglo IX, tiene dos siglos más. Lo dice el carbono 14», explica Iván Muñiz, uno de los dos directores de las excavaciones del Peñón de Raíces. El castillo de Gauzón dirigió la vida de la comarca, según los arqueólogos, desde la primera Alta Edad Media, antes incluso de la fundación del Estado asturiano, antes de la batalla de Covadonga. «Lo que permiten las pruebas del carbono 14 es que nos podemos formular muchas preguntas. ¿Quién ordenó levantar el castillo? Cabe suponer que antes de Pelayo en Asturias había una organización social jerárquica. Un campesino lo que construye es una cabaña, no va más allá. ¿Eran visigodos? La documentación que existe de los primeros años del castillo de Raíces apenas es nada», comenta Muñiz. «Las crónicas medievales hablan de que había que defender Avilés. Sin embargo, creemos que la función del castillo era marcar el territorio», asegura el codirector de las excavaciones. El castillo de Gauzón, fuera de misterios caballerescos, venía a ser el ayuntamiento de la comarca, el edificio singular al que acudía el pueblo para «arreglar» sus papeles medievales, es decir, las oficinas de administración de un territorio extenso que dominaba casi toda la franja central del reino de Asturias. La primera mención expresa al castillo que está emergiendo de las entrañas del Peñón de Raíces es del año 905. Se trata de un diploma (un documento oficial). Habla de la fortaleza, precisamente, en la época de Alfonso III, cuando el reino de Asturias se mudaba a León, por aquello de la expansión y de la reconquista. Pero la historia de los habitantes de la fortaleza se remonta dos siglos atrás, al VII y al VIII. Por entonces, el Reino de Toledo dominaba la Península. Los visigodos que habían cruzado el Rin habían ido carcomiendo el Imperio de Roma hasta alcanzar el centro de una de sus provincias más fecundas: Hispania. Los documentos históricos no aseguran que los visigodos dominasen la región que actualmente es Asturias. Lo más natural, piensa Iván Muñiz, es que esta tierra estuviera en manos de aristócratas autónomos o semiindependientes. Aunque nunca organizados en un Estado como el que vendría tras la batalla de Covadonga. Ése es el misterio. La «Historia Silense», de nuevo, es la primera que menciona la existencia cierta del castillo de Gauzón. En el documento se describe la fortaleza de Raíces como una de las más notables de cuantas había por entonces en Asturias. Y menciona a uno de sus primeros habitantes. Alfonso III encerró en la fortificación a su hijo rebelde, el infante don García. ¿Quién gobernaba el castillo de Raíces? Iván Muñiz recuerda que la fortaleza era una propiedad regia que dirigía un delegado real con el título de «comes» (conde). Esta delegación era temporal y convertía al representante del rey en una especie de superalcalde que tenía bajo su imperio un territorio de grandes proporciones que, por entonces, en el siglo X, empezaba a tomar la forma actual: Avilés, Gozón, Illas, Castrillón? El primero de los que se tienen noticia, aunque todavía no segura, es Pedro Peláez. Este aristócrata había pasado por Tineo, donde había gestionado, quizás, una fortaleza de características similares a las de Gauzón. El castillo fue uno de los escenarios más señalados en el que se desarrolló la rebelión del conde Gonzalo Peláez, en el siglo XII. Este noble, el más poderoso de la época, dominaba lo que por entonces se conocía como las Asturias centrales. Se levantó en armas contra el rey Alfonso VII, que estaba en León. Estos acontecimientos, recogidos en la «Crónica del emperador Alfonso», son considerados como la primera muestra de cierto nacionalismo asturiano. El castillo de Gauzón se quedó en manos de Gonzalo Peláez, es decir, en territorio del rebelde. Fue asediado y tomado por los «fieles del rey» durante el primer año de rebelión. Y ahí se acabó cualquier atisbo de devolver a Asturias las glorias que poseyó en su tiempo más regio. Todo volvió al orden y, tras la rebelión de Gonzalo Peláez, los reyes -que seguían siendo los dueños del castillo- decidieron acortar los gobiernos de los castellanos, un modo de evitar el anclaje de los nobles a un poder que los monarcas entendían que no les correspondía. El castellano cambia su título al de tenente. Tras los muros de la fortaleza ya no habrá altos aristócratas, la superalcadía del alfoz será ejercida por nobles rurales de baja categoría. Didaco Manzaneda, de Gozón, fue tenente hacia 1188. Pero no todo quedó en Asturias: Sancho Álvarez, nieto bastardo del rey Alfonso VII -hijo de Urraca la Asturiana- también fue tenente del castillo. Iván Muñiz asegura que este cargo, la tenencia, daba relumbrón al noble que lo poseía, es decir, que ser tenente no implicaba necesariamente vivir en el castillo. «La corte estaba lejos y las conspiraciones eran más efectivas si había un cargo por el medio», explica. Entre 1200 y 1222 García González de Candamo fue en varias ocasiones tenente del castillo. La importancia de este noble estaba en su vinculación a la orden de Santiago. Y es que, precisamente, en 1222 la fortaleza pasa a ser propiedad de los caballeros de Santiago, abandonando, para siempre, sus vínculos reales y cualquier relación militar (ya no hay vikingos ni piratas árabes). Pese a ello, los caballeros continuaron cediendo la administración del castillo a nobles asturianos. El cargo, entonces, era el de encomendero. Alfonso XI, en el año 1335, pidió a la Orden de Santiago que concediera la encomienda del castillo a su hijo Enrique II de Trastamara, que había heredado las propiedades de Rodrigo Álvarez en Asturias. Esas propiedades fueron la mecha que encendieron las primeras rebeliones contra Pedro I el Cruel. Por entonces, el castillo todavía daba un barniz de nobleza a aquellos que poseían su gobierno. Pero esto cambió en el siglo XV. En 1420 el Infante Enrique, maestre de la Orden, cedió «la tierra que dicen castillo de Gauzón» en Raíces a Fernando González de Oviedo, vecino de Avilés. «El documento es importante por dos razones, porque el castillo es ya sólo una propiedad agraria, es decir, ha perdido su función militar y porque es posible que haya sido abandonado en el período de guerras civiles de la segunda mitad del siglo XIV», dice Iván Muñiz. Además, recuerda el arqueólogo, documenta fidedignamente la ubicación de la fortaleza en Raíces. Las actuales excavaciones, que dirigen Iván Muñiz y Alejandro García, tienen como precedente las que llevó a cabo Vicente José González García en los años setenta. Mucho antes, Jovellanos pasó por el Peñón e hizo una descripción casi arqueológica de lo que veían sus ojos: restos monumentales desperdigados por las casas de los campesinos, que levantaron sus casas a costa de las piedras seculares que habían dominado la mar y la comarca desde los tiempos en que la oscuridad reinaba en un país cuyos símbolos tuvieron tanto que ver con la fortaleza que está emergiendo en Castrillón.
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Admin el Lun 2 Mar 2009 - 23:07
He logrado dar con el enlace original del periódico la Nueva España donde se publicó la noticia.http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2009030100_36_731000__Aviles-Tras-murallas-Gauzon
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Nuevas declaraciones de Fdez Conde en relación a la Cruz de la Victoria
Admin el Mar 31 Mar 2009 - 22:12
La Cruz de la Victoria estará presente en un congreso internacionalPublicado el 01/02/2008.Fuente: http://www.lne.es. «Hasta ahora la documentación escrita nos facilitaba el principal conocimiento para tratar de aquilatar la cronología del castillo de Gauzón. Las crónicas y documentos medievales decían que éste había sido construido por el rey astur Alfonso III a finales del siglo IX. La misma documentación fijaba el abandono del castillo hacia el siglo XV. Además, la inscripción que recorre el reverso de la Cruz de la Victoria señala que la joya había sido elaborada en Gauzón en al año 908. Las excavaciones arqueológicas nos han permitido datar dos siglos o dos siglos y medio antes la construcción del primer castillo», explicaron Alejandro García e Iván Muñiz.«Este año la Cruz de la Victoria cumple 1.100 años y estará presente en un congreso de expertos que celebraremos dentro de unos meses al que vendrán arqueólogos de toda Europa. Podrá verse que lo que pasó en Asturias fue un proceso normal de reorganización política en la Edad Media que se dio en Irlanda, Suecia o Islandia», manifestó el catedrático de la Universidad de Oviedo Javier Fernández Conde. La datación en el siglo VII del castillo de Gauzón «también arrojará luz sobre la figura de don Pelayo, que probablemente fuera un jefe local de Cangas de Onís», concluyó.http://www.arqueologiamedieval.com/noticias/noticias.asp?ref=2389Publicado en la revista especializada arqueología medieval, FUENTE LA NUEVA ESPAÑA.
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Baltar el Sáb 4 Abr 2009 - 20:58
Creo que esto también es interesante.Análisis crítico sobre algunos aspectos de la historiografía del reino de AsturiasJulia Montenegro ValentínHispania: Revista española de historia, ISSN 0018-2141, Vol. 54, Nº 187, 1994, pags. 397-420Resumen de Análisis crítico sobre algunos aspectos de la historiografía del reino de AsturiasJulia Montenegro ValentínEs casi unánimemente admitido que el grado de fiabilidad de las crónicas del ciclo de Alfonso III es notable, que aportan datos de interés para conocer la historia de los primeros tiempos del reino de Asturias, y que sólo incurren en omisiones deliberadas o distorsionan la realidad cuando ésta choca con lo que los redactores de dichas crónicas querían plasmar: crear la idea de la continuidad del reino visigodo de Toledo en el de Asturias. Ahora bien, para nosotros es evidente que no hubo solución de continuidad entre el reino visigodo de Toledo y el de Asturias. Por ello estimamos que estas crónicas se limitaron a consignar una realidad; más magnificada, eso sí, en la Ovetense. Cuestión distinta son determinadas omisiones y alteraciones de esta misma versión que, desde nuestro punto de vista, tienen una clara intencionalidad: omite cualquier referencia a los astures y es la única que narra la llegada a Asturias de nobles visigodos de estirpe regia que eligieron como príncipe a don Pelayo. Consideramos que la decisión de la Ovetense de quitar protagonismo a los astures y otorgárselo a un grupo de nobles visigodos tenía la finalidad de justificar la posición de preeminencia de la nobleza del reino de Asturias en un momento en que se consolidaba su poder económico, social y político
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Baltar el Sáb 4 Abr 2009 - 21:41
Neville, otro interesante trabajo.Los astures y los inicios de la Monarquía Astur (Una aproximación)Luis Rubio HernansáezAntigüedad y cristianismo: Monografías históricas sobre la Antigüedad tardía, ISSN 0214-7165, Nº 14, 1997 (Ejemplar dedicado a: La tradición en la antigüedad tardia), pags. 299-322Resumen Texto completohttp://interclassica.um.es/investigacion/hemeroteca/antigueedad_y_cristianismo/numero_14_1997/los_astures_y_los_inicios_de_la_monarquia_astur_una_aproximacion
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Baltar el Sáb 18 Abr 2009 - 11:46
Otro autor Isla Frez que también duda de las tesis goticistas.http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=9498&info=resumen&modo=popupResumen de Consideraciones sobre la monarquía AsturAmancio Isla FrezDos temas de interés para valorar las supuestas continuidades entre el reino visigodo de Toledo y el astur son la procedencia y primera actividad de Pelayo y la sucesión al trono en el reino astur. Son demasiadas las dificultades que implica entroncar a Pelayo con la administración goda. Por otro lado, el uso de un determinada vocabulario en la Crónica de Alfonso III pretende hacer de estos momentos iniciales una fase más de la monarquía de Toledo. La sucesión al trono astur tampoco cabe entenderla desde la perspectiva visigótica. Se han estudiado le herencia, elección, acceso de reyes de origen humilde, tiranías y al papel de las princesas destacando las originalidades en relación con el reino godo. Tras establecer cuáles son las pautas en la sucesión al trono se abren nuevas maneras de percibir el neogoticismo y sus problemas
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Re: RECONQUISTA - EL REINO ASTUR Y SUS ORÍGENES
Admin el Vie 8 Mayo 2009 - 13:17
Otro interesante enlace de un autor británico acerca del bandidaje en el reino de Asturias y sus connotaciones. http://tenthmedieval.wordpress.com/2009/03/25/bandits-and-witches-in-asturias-what-do-enemy-priests-get-called-again/
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